Día 27- En el bosque | Kiribakushima

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Pov Omnisciente

Estaba perdido.

Era de noche y, mientras huía de los lobos que se encontraban en aquel lugar, rogaba por encontrar un lugar donde esconderse o a alguien que él pudiese ayudar.

Él no quería estar allí.

Ya no.

Si tan solo no hubiese discutido con su padre, para después salir corriendo al bosque, no estaría allí.

Huyendo por su vida, huyendo de unos lobos hambrientos; y rogando a los cielos poder salir de allí vivo.

La noche era fría y oscura.

El bosque estaba repleto de árboles, lo cual agradecía, pues le ayudaba a escapar de los lobos.

De los cuales sabía que se acercaban por sus fuertes y veloces pisadas, las cuales rompían las ramas caídas de los árboles.

Y, de pasar de una noche con aullidos y nada silenciosa, paso a ser una en la que, en vez de estar en un bosque, parecía que estuviese en un panteón.

Todo paso a estar en silencio.

Mas él no dejaba de correr con la respiración entre cortada.

O no, hasta que frente a él apareció un hombre de vestimentas extrañas.

En ese momento, por la sorpresa, cayó de espaldas al detenerse.

Un grito salió de entre sus labios, para después calmarse un poco.

Alguien estaba allí.

Seguro que le ayudaba a regresar a casa.

O, ese había sido su plan, hasta que, por la luz de la luna, pudo verle el rostro al extraño.

Su cabello era rubio y, de entre sus labios, sobresalían unos colmillos.

En ese momento recordó que, cuando era niño, se decía que en aquel bosque había un vampiro.

Pero, al crecer, solo creyó que era una leyenda. Un mito. Después de todo, los vampiros no existían. Eran seres mitológicos, ¿no?

- Has regresado- soltó el vampiro, sonriendo de lado de una manera imponente.

Mientras que el otro joven, asustado, solo pudo querer huir de allí también.

Kiribaku Month 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora