❛𝐌𝐢𝐨❜ [ᴊᴏᴏᴋʏᴜɴ] ~ᴀᴅᴀᴘᴛᴀᴄɪᴏ́ɴ~

CAPÍTULO I

Jooheon POV

Termino de arreglar mi traje frente al espejo de mi dormitorio y miro el reloj de mi muñeca. Faltan quince minutos para para las siete de la mañana. Para está altura el chico que traje anoche ya debería estar listo para irse, pero cuando salgo de mi vestidor, veo que aún está en la cama disfrutando su desayuno.

—¿Por qué estás aquí?— le digo mientras lo miro a los ojos.

—Terminando mi desayuno Heon— me dice descaradamente.

Sabía que esto fue un error. Debería haber llamado a Minhyuk. Él es un trabajador de sexo, pero al menos es profesional, limpio y nunca tengo que lidiar con sus miradas.

—Repito. ¿Por qué todavía estás aquí?— le digo fulminandolo con la mirada. Él traga con fuerza el trozo de fruta que estaba masticando y el color abandona su piel. Bien.

—Pero... creí que... siendo la segunda vez...—

—¿Acaso no te hice sentir bien?— le digo, aunque ya se la respuesta.

—Si...—

—Entonces cumplí todas mis promesas, ahora vete— le digo mientras vuelvo a mirar mi reloj. ¡Mierda! Se me hace tarde.

Voy hacia la mesita de luz junto a mi cama y presionando el cero, llamo a seguridad.

—Hey Hyunwoo! Sí, todo perfecto. Por favor manada a tus chicos y escolten a... ¿Cuál era tu nombre?— le pregunto porque sinceramente, ya no lo recuerdo.

—Jun— me dice casi susurrando

—¡Eso! Jun. Por favor escolten a Jun fuera de mi propiedad. Y alístate porque vamos a salir—

Cuelgo el teléfono sin esperar una respuesta. Hyunwoo y yo nos conocemos desde la secundaria, además de ser mi jefe de seguridad y guardaespaldas, es mi amigo.

En ese momento, alguien golpea la puerta y poco después, Hyungwon entra a la habitación. Su aspecto es pulcro y profesional. Apenas si le dedica una mirada al chico que se esta vistiendo antes de comenzar a recordarme todas las tareas que me esperan el día de hoy.

—Buenos días Jooheon. Te recuerdo que tienes una reunión en una hora con el Sr. Kang para cerrar la compra de sus hoteles en Río de Janeiro. Al medio día, tienes un almuerzo con tu padre y está tarde, tienes que dar la charla en la universidad Kyung Hee Cyber. Además tienes la videoconferencia con el director de JHN Company en Nueva York con relación a la demanda de los empleados por falta de seguridad durante la construcción del último hotel frente a las Cataratas del Niágara— me dice mientras caminamos fuera de mi habitación.

Los sonidos de mis agentes de seguridad arrastrando a Jun fuera de mi casa, aún se escuchan desde el garage. Hyunwoo ya está esperándonos y abre la puerta de la limosina negra para que yo entre. Hyungwon entra detrás de mi y Hyunwoo, por último.

—Evidentemente voy a tener que viajar a Nueva York. Mis informantes me dicen que la demanda de los trabajadores no es infundadas. Ese maldito presidente estuvo abaratando costos y malversando fondos gracias a ello, quedándose con una buena tajada. Haz que preparen mi jet lo antes posible, pero no les avises de mi llegada. No quiero alertarlos de nada. Habla con los muchachos de IT para que descubran todo lo que puede ser descubierto sobre él y diles que monitoreen todas sus actividades bancarias y estén preparados para congelar todos sus activos en el momento que yo dé la orden— le digo a Hyungwon y él asiente.

—¿Con respecto a ese viejo caza fortunas no hay manera de postergarlo? — realmente no tengo ganas de ver a mi padre.

Es cierto que el me dió un préstamo para comenzar mi empresa, un préstamo que, por cierto, yo ya pagué. Desde que comencé a tener éxito, él decidió retirarse y comenzar a vivir de mí. Mis padres se separaron cuando yo cumplí veinte años. Mi madre se cansó de que mi padre la engañara y decidió irse. Aun mantengo contacto con ella y la ayudo siempre que lo necesita, aunque a diferencia de mi padre, ella es muy independiente. Al igual que yo, solo necesitó un puntapié inicial pero luego se manejo sola. Tiene una pequeña panadería dónde vende las mejores tortas y pasteles que he probado en mi vida y es felíz.