CAPÍTULO VII

744 83 27
                                    

Changkyun POV

Danieeel...—

La puerta de mi habitación se abre y él entra. Hace tres días que me tiene encerrado porque golpeé su rostro.

Ven aquí, debes tener sed— me dice y tironea de mi cabello para que me mueva del rincón donde estoy acurrucado. Espero que me de agua, pero cuando fuerza la botella dentro de mi boca, Vodka se desliza quemando mi garganta. Me ahogo y comienzo a toser, pero me obliga a tragar el ardiente líquido.

Durante estos tres días, casi no me ha dado agua, solo alcohol, lo que me mantiene en un estado de embriaguez constante.

Déjame ver cómo está tu hombro, ¿Aún te duele?— me pregunta. La paliza que me dió el otro día luego de que me atreviera a golpearlo, fue más fuerte que las anteriores al punto de que dislocó mi hombro. Él se encargó de ponerlo en su lugar nuevamente, por supuesto no iba a llamar a un doctor para mí.

¿Y cómo estamos por aquí abajo?— dice está vez y tirándome sobre la cama, me fuerza sobre mi estómago y separa los cachetes de mi culo, el cuál todavía siento dolorido desde su última violación.

Creo que ya podemos volver a jugar— dice y mis puños se cierran sobre las sábanas. Aprieto mis ojos con fuerza y lágrimas comienzan a caer. Oigo el sonido de la botella lubricante abrirse y poco después, sus dedos están dentro de mi. Mi mente está envuelta en una neblina gracias al alcohol y el hambre. Me retiro a mi interior, abstrayéndome de la situación en la que se encuentra mi cuerpo y pienso en momentos felices de mi vida. Recuerdo a mis padres, a mi madre leyéndome cuentos antes de dormir. Adoro los libros. Cada uno de ellos es un mundo nuevo para descubrir, una nueva aventura para vivir. Vuelvo a la realidad cuando siento un objeto en mi interior.

Ojalá no lo hubiera hecho.

¡Mira! ¡El consolador ya está todo dentro! Vamos a hacer lugar para mí también—

Te haré sentir bien...

AAAAAAAAAAAH— Despertó gritando y con el sudor perlando mi frente. Mi respiración es agitada y siento la sombra del dolor que sentí aquella vez. Tomo mi almohada y la presiono sobre mi rostro.

—¡MIERDAAAAAAA!— grito con toda la capacidad que mis pulmones me lo permiten.

Odio aún tener pesadillas, esta especialmente. Ese momento fue el que me hizo tomar la decisión de escaparme, sabiendo que, si seguía en esa casa, mi tío algún día terminaría lisiándome o incluso matándome.

La alarma de mi reloj empieza a sonar haciéndome gritar de nuevo.

Miro a mi reloj con odio, como si el fuera el culpable de todo lo que me ha pasado en la vida. Cuando voy a apagarlo, el reloj rueda hacia el piso y comienza a sonar aún más fuerte, moviéndose por toda la habitación.

—Maldito seas Kihyun. Tu y tus regalos de cumpleaños— digo mientras persigo el reloj hasta que logro atraparlo. Cuando al fin logro silenciar la maldita cosa, tengo una sonrisa en mi rostro, que es seguramente, lo que Kihyun esperaba lograr.

Viendo la hora que es, voy hacia el baño para tomar una ducha y luego realizo mi rutina matutina, alistándome para una cita con el Dr. Baek.

Una hora después, salgo de mi casa y voy hacia el centro de la ciudad, al edificio donde él tiene su consultorio.

—¡Hola Lily!— saludo a la secretaria.

—Hola Changkyun, toma asiento. El Dr. Baek estará contigo en un minuto— me dice y le hago caso, como tantas otras veces en el pasado.

❛𝐌𝐢𝐨❜ [ᴊᴏᴏᴋʏᴜɴ] ~ᴀᴅᴀᴘᴛᴀᴄɪᴏ́ɴ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora