𝗠𝗼𝗿𝗲 𝘁𝗵𝗮𝗻 𝘄𝗼𝗿𝗱𝘀• Pedri González.

Capítulo 23

Dos semanas más tarde.

-¿A que horas llegaréis?

-Sobre las diez de la mañana. -Fer me hablaba desde el otro lado de la llamada.

-¿Tan pronto?

-Si, Dafne si.

-Agh esta bien, estaremos ahí temprano

-Eso espero.

Seguimos hablando un rato más.

Íbamos a hacerle una "sorpresa" a Pedri. No era gran cosa, pero si íbamos a recogerle. Por fin una de nosotras teníamos el carnet de conducir, ja pero no soy yo, ojalá, sino que es Andrea.

Eso si casi nos chocamos con un árbol.

-Andrea, gira para la derecha.

-¿Por que?

-Porque te lo digo yo.

-Pero yo soy la que he estudiado- giro la cabeza hacia mi lado.

-¡Andrea el árbol!

Desesperadamente giro la cabeza de nuevo hacia la carretera, puso su vista en el árbol a pocos metros de nosotras. Hizo una maniobra bastante rara, girando de lado a lado el volante, creo que no sabía lo que estaba haciendo.

Pasamos por el lado del árbol, casi rozándolo, giré mi cabeza hacia ella.

-Casi me matas.-solté todo el aire que estaba aguantado.

-No eres la única que hubiera muerto.

-¿A no?

Me miro mal, y saco el coche de donde lo tenía estacionado.

Mañana a las cuatro de la tarde tenía un examen, uno de los más importantes.

Después de la llamada, mande un mensaje a Andrea y le dije lo que hablé con Fer.

Seguí estudiando toda la tarde y después me duche, me puse el pijama y me fui a dormir.

{...}

Pi- Pi- Pi

El sonido del despertado me despertaba a las ocho de la mañana. Iba a apagarlo pero me acorde de lo que iba a pasar, me levanté de la cama con cuidado y fui directamente al baño, no sin antes agarrar la ropa que me iba a poner.

Me duche y me vestí, salí del baño y me fui de la habitación con cuidado para no despertar a Sofia.

Espere en la puerta de la habitación unos cinco minutos aproximadamente, después salió Andrea y cogimos su coche que estaba en el parking de la universidad.

El trayecto hacia el aeropuerto el "El Prat". Llegamos y fuimos a buscar la puerta de salida de su avión.

Había más personas al rededor nuestras, pero mis pensamientos estaban puestos únicamente en los dos canarios que estaban apunto de salir de esa puerta.

La gente comenzó a andar hacia adelante agrupándose entre ellos. Miramos hacías nuestros lados.

. . .

-¿Seguro que van a venir?

-Si, ten paciencia. -la verdad tenía ya pocas esperanzas.

Cinco minutos más tarde.

Otros cinco minutos más tarde.

Llevábamos diez minutos esperando ya casi ni salía nadie.

-¿Nos...

La interrumpí-Espera.

Ella giro su cabeza hacia la dirección en la cual yo estaba mirando, un par de chicos salieron de la puerta.

Uno de ellos miraba hacia los lados como su con su mirada buscará a alguien, por el contrario el otro andaba cabizbajo, como si no le importara su alrededor.

¿Que estarás pensado canario?

Mi voz les sorprende y ambos me miran-Hola chicos.

Él chico cabizbajo, alzó la vista hacia nuestra dirección y sonrió, de estar en su mundo, a la vuelta de la realidad.

-Morena.-dijo.

-Hola canario.

Ya no había ni había nadie a mi alrededor, el resto de personas que nos rodeaba desapareció y solamente éramos él y yo.

Él canario y la morena.

Corrí a sus brazos salte sobre ellos y le abracé, fuertemente, él antes de nada soltó la maleta que tenía agarrada. Me agarro por abajo de los muslos y me besó. Nos fundimos en otro beso de los nuestros.

Ojalá poder decir eso, que salte sobre él y lo bese pero no fue así. Fue diferente.

Caminamos lentamente con nuestra mirada junta sin despegarnos como si un imán nos atrajera lentamente.

Una vez que estuvimos uno enfrente del otro, nos fundimos en un solo abrazo, pero un abrazo que decía mucho, lo echaba tanto de menos, noté su sonrisa en mi ojera.

-Te he echado tanto de menos, morena.

-Yo también, canario.

Bese su mejilla mire a mi lado y vi a Andrea besando a Fer, un beso sincero del cual se habían echado demasiado de menos.

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