Bestia Vs Bestia (SaneIno)

✦ Contener

El único motivo por el que no le habían expulsado de la academia era por mantener un buen promedio, si bien no era excelente solía estar puntos más arriba del resto, a palabras del mismo director si lograba esforzarse podría conseguir lugar en una buena universidad y tener un futuro prominente.

Aunque de resto, era algo que honestamente no le interesaba al mismo Inosuke, porque claro, para eso tenía que tener mayor control en su conducta que solía ser el motivo por el cual tenía problemas dentro y fuera de la institución, y él prefería permanecer como estaba hasta ahora.

Al principio la mayoría de los profesores lo tenían catalogado como un chico problema y descortés por todos los rumores que hablaban de él, todos rogaban no tener que impartir curso en la clase donde él se encontrara ya que suponían sería complicado tratar con él.

Cuando tenían la mala suerte de coincidir en su clase, tenían la extraña indicación de no hacer públicas sus notas o no exponerlas ante el resto del alumnado, creían que el director tenía una conexión con el chico o movía sus influencias para hacerlo pasar de año si él no lo conseguía por sí mismo.

Pero con el transcurrir de los meses se sentían totalmente avergonzados por creer aquello.

Si bien la reputación que tenia de ser un chico soez, irresponsable al que le importaban pocas cosas no cambiaba para ellos, la perspectiva académica permutaba drásticamente cuando obtenían sus calificaciones después de cada examen. Todos coincidían en que el chico no mantenía un promedio alto debido a que no solía entregar la mayoría de las tareas o proyectos, pero al momento de realizar el examen que era el que tenía más peso para las materias, lograba responderlo de manera impecable.

Nadie entendía por qué se esmeraba en ocultar aquella información para el resto de alumnos, seguramente si lo supieran se evitaría las constantes burlas que lo clasificaban como un idiota, aunque por palabras de él era algo que poco le importaba.

Después de haber sido echado de la clase de matemáticas azotando la puerta corrediza tras haber salido expresando así lo molesto que estaba, se encamino a la oficina del director apretando los puños y maldiciendo por lo bajo al profesor albino.

No habría tenido problema en gritarle a la cara que era un completo imbécil y hacer de esa pequeña disputa una más grande, pero se sentía agotado y un poco mareado a causa de no haber desayunado y si conseguía que aquel profesor le respondiera con golpes como lo deseaba, era obvio quien perdería, siempre se dejaba llevar por la ira y en ese momento quería romperle la cara, pero no era tonto, no podría hacerlo con las pocas fuerzas que tenía.

Tan pronto llego a su destino tocó la puerta recibiendo respuesta casi de inmediato por una voz sutil y amable invitándole a pasar.

-Buen día, director Ubuyashiki – hizo una reverencia antes de cerrar la puerta tras él y sentarse despreocupadamente en una silla vacía frente al escritorio del principal de la academia.