Capíulo 48

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Angie y Bastian salieron en la mañana de ese mismo día sábado, este creía que iban a una fiesta de cumpleaños de una tía lejana en la que su novia tenía la responsabilidad de representar a la familia

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Angie y Bastian salieron en la mañana de ese mismo día sábado, este creía que iban a una fiesta de cumpleaños de una tía lejana en la que su novia tenía la responsabilidad de representar a la familia. El plan era llegar en una hora o una hora y media, comer allí y regresar a la siesta. O eso era lo que creía Bastian, porque Angie pensaba que la cosa se retrasaría un poco más cuando él se encontrase con su madre.

Ella estaba segura de que era un buen plan, de que era saludable para él hacer aquello y que tarde o temprano terminaría por comprenderlo.

—No veo la hora de que terminen los exámenes para que podamos pasar más tiempo juntos —comentó él—, no veo la hora de repetir lo del otro día para poder hacerte sentir mejor esta vez.

—¿Quién dijo que estuvo mal? —preguntó Angie—. Bastian, ya lo hablamos... ha sido perfecto... es normal lo que sucedió... la práctica nos irá perfeccionando.

Bastian sonrió.

—Fue la mejor primera vez que pude haber imaginado —añadió ella.

—Recuerdo que una vez en una conversación dijiste las últimas veces eran más importantes que las primeras...

—Sí, pero cuando eso no calculaba que tú fueras el primero —respondió ella con una sonrisa.

—¿Calculabas que fuera el último? —inquirió él.

—No, tampoco —respondió ella sonriente—, pero ahora quiero que seas el primero, el único y el último.

—Yo también lo quiero así —dijo él.

—¿Crees que no necesitarás probar a otras mujeres? —preguntó ella—. Es decir, hoy en día... estar con una sola mujer toda tu vida...

—¿Y para qué quiero a alguien más? Tú eres todo lo que necesito —susurró.

Angie sonrió con emoción.

—Y en poco tiempo seré el mejor en la cama y tú estarás orgullosa de mí —prometió.

Angie se echó a reír.

—¿Orgullosa?

—Claro, porque te dejaré siempre satisfecha —dijo y le guiñó un ojo.

—Hablando de eso, creo que Maxi lo sabe... No, estoy segura de que lo sabe.

—¿Por qué lo dices? Hoy estuvo extraño...

—Exacto.

Angie procedió a contarle la conversación con su hermano y luego Bastian le contó la suya.

—Está clarísimo, lo sabe —zanjó Angie.

—Pero no está enojado, sino no bromearía ¿No es eso genial? —inquirió Bastian.

—Nos va a echar en cara esto hasta que tengamos cuarenta años... —musitó Angie.

—Lo sé... tocará aguantar... Recuérdame ¿por qué no dijimos antes?

Lo que Angie creía que sabíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora