62. Rehenes

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.Narración Tercera Persona.

2 meses después - Coruscant

La Comandante Sabrina Onasi se encontraba en el Sangre Eterna, concretamente en el puente de mando mientras sus ojos prestaban atención y detalle hacia una tableta digital que tenía en sus manos, la castaña estaba revisando unos archivos sobre los recientes ataques relámpago de los rebeldes en las últimas 4 semanas. El General Lannister le había dado esta misión y tarea de gestionar y relacionar estos ataques y, unificarlos con el más flamante de ellos, una entrega de comida al sistema Bardotta, cerca del núcleo galáctico, la joven Imperial bien sabía que algo se escondía más allá de hacer un acto de buenas personas, su mente perceptiva y aguda iba a intentar averiguar qué había hecho la escoria Rebelde en ese planeta en particular, lo que parecía una acción de amables y libertarios podría ocultar algo bajo esa máscara de bondadosas intenciones. Algo... que necesitaba descubrir.

Sabrina: Almirante Dyrleg, quiero que alisten el Sangre Eterna y llamen a una escolta de soldados. Iremos al sistema Bardotta.

Dyrleg: No tengo registro de que el General haya pedido eso.

Sabrina: Por que no lo pidió él. Lo solicité yo. Haga lo que le dijo Almirante. —ordenó Onasi mientras caminaba hacia la puerta— ¡Y llamen a la Teniente Mors!

[...]

Hangar 3 del Destructor Estelar

Delian: Yyy bien, Comandante Onasi. ¿A donde nos deparará el grandioso destino de la vida? —preguntó con cierta felicidad en su voz por volver a tener una misión después de sus vacaciones en Naboo—

Sabrina: Nos vamos de misión Delian. Tenemos cosas que hacer. —dijo con un tono y forma de hablar serias, no muy característico de su personalidad—

Delian: Me vendría bien un contexto sabes...

Sabrina: Vamos a Bardotta. —dijo—

Delian: ¿Bardotta? —preguntó algo sorprendida y disconforme— No quiero ir a Bardotta, esas aves humanoides me causan escalofríos de solo verlas. —se quejó la Chiss—

Sabrina: No lo dije como idea, Mors. Estoy en una investigación a pedido de Lucio, y lo que necesito de ti es tu buena vista. 

Delian: —ahogó un suspiro indignada— ¿Solo me vas a utilizar?

Sabrina: Tus vacaciones en Naboo estaban siendo eternas, ya era hora de trabajar un poco. ¿No te parece?

Delian: Me gustan las vacaciones...

Sabrina: Deja de quejarte, agradece que vas conmigo y no con Lucio.

Delian: Ciertamente... en este punto me habría enviado devuelta a Csilla con una patada. 

Sabrina: Escúchame. —Sabrina se volteó, su seriedad se mantuvo. Acto que sorprendió a Delian fue como la castaña posaba ambas manos en los hombros de la mujer con piel azul— No quiero que te separes de mí. Puede que hayan rebeldes o criminales que estén dispuestos a matarnos o raptarnos. Iremos con el Escuadrón de Seth Nákama, pero eso no nos asegura nada.

Delian: Tranquila tranquila... Sabrina... estas muy rara hoy. ¿Qué te sucede? 

Sabrina: Yo... no quiero hablar de eso. Solo... haz lo que te pido. ¿Si?

Delian: —asintió con la cabeza, sin soltar ni un suspiro—

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Star Wars Lannister: La Historia Nunca Contada [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora