86. Deslealtad

22 2 3
                                    

Crucero Venator

Soldado Mandaloriano 1: Mi señor. —dijo en voz baja— Haga lo que haga, estamos en desventaja. Será mejor que nos preparemos para una huida de emergencia, no estamos listos.

Mandalore el Renacido: ¡No! —gritó, volteándose con ira¡No cuando estamos tan cerca de devolverle la gloria a los Mandalorianos! ¿¡Dónde quedó esa pasión por las batallas?! ¿¡Dónde quedó, el deseo de restaurar el Honor de nuestro pueblo?! ¡Somos Mandalorianos, jamás nos retiramos de una batalla, y ustedes saben que no miento!

Soldado Mandaloriano 2: Sí...

Mandalore el Renacido: ¡Lucio Lannister será poderoso, pero yo se quien es verdaderamente, no debemos luchar cuando exponer sus verdades y secretos hará que se destruya así mismo!

Un nuevo y tercer soldado se apareció en el puente de mando del Venator, acercándose al líder Mandalore el Renacido, alarmado, pero con noticias.

Soldado Mandaloriano 3: Mi señor, el Sangre Eterna de Lucio Lannister ha aterrizado en el hangar.

Mandalore el Renacido: Excelente. —sentenció, con una sonrisa plasmada en sus labios

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Hangar Diecisiete 

El suelo de la bahía del hangar era de metal, desgastado por la edad y los innumerables aterrizajes y despegues, y aquí y allá brillaba tanto como reflejo de cristal. El Sangre Eterna seguía en su sitio, pero su cuerpo ya se estaba enfriando cuando; Lucio se acomodó las vestimentas que poseía, recogió su sable láser para colocarlo en su cintura, y bajó la rampa con los convencionales movimientos indiferentes pero alerta de un Sith. Aunque el hangar espacial no estaba precisamente abarrotada de soldados Mandalorianos, eran lo bastante frecuentes para que todos fijaran su atención en él. La rampa descendió normal, y de ella bajó Lucio, solo, ordenándole a la Élite Carmesí que no bajase del Sangre Eterna si él no daba la orden de hacerlo. 

Mandalore el Renacido, salió de la puerta de un ascensor, con su máscara/casco en mano, mostrando su rostro, su cabello pseudo largo y la barba de dos o tres días de crecida, sus perceptores oculares con ojeras demacrados por la guerra, ahora anuncian una mirada de desafío y de victoria a su mismo tiempo.

Algunos soldados Mandalorianos se acercaron al Carnicero de Felucia, no en señal de hostilidad, pero sí para acorralarlo de manera sutil, Marcus Kyler, se detuvo frente a frente con su general, en intercambio de miradas fue prominente, y luego, las conversaciones.

Lucio: ¿Marcus? ¿Eres tú? —preguntó Lucio, mirando de abajo hacia arriba las vestimentas de su soldado Tiempo sin verte.

Marcus: Sí... lo mismo me gustaría decir.

Lucio: Dime... ¿Qué es todo esto? —preguntó haciendo un movimiento de mano indicando todo lo que sus ojos veían— 

Marcus: Esta, es mi Legión. —dijo Kyler

Lucio: ¿Tu Legión? —cuestionó Lucio— 

Marcus: Así es.

Lucio: ... ¿Qué haces con eso? —preguntó haciendo un movimiento de cabeza indicando la máscara de Mandalore En donde la conseguiste...

Star Wars Lannister: La Historia Nunca Contada [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora