Entre sus brazos ... [CM#1] ✔

Capítulo XIV

Proceso y analizo la pregunta que Christopher acaba de hacerme. ¿Debería responderle con la verdad? Me quedo en silencio por largos minutos en los cuales, su atenta mirada no dejaba de escanearme. Decidí decirle la verdad, ya han sido muchas mentiras.

-Así se llamaba mi bebé _Respondí al fin, no sabría definir con claridad que causó mi respuesta en él. Frunció en ceño ligeramente y agregó:

-Reconozco que esperaba muchas respuestas y esa no estaba entre ellas _Musita y me encojo de hombros. No tiene que darle tantas vueltas al asunto, después de todo su nombre es muy común.

-¡Muy bien! _Exclamo con más efucividad de la necesaria. No quiero hablar y siempre termino haciéndolo cuando se trata del chico de iris grises.

-Usted confía en mi para contarme sobre el suceso más doloroso y traumático de su vida, sin embargo, yo no confío en usted para responder la pregunta que me hizo. Como compentasación disiparé una de las más grnades dudas que pasan por su mente cada vez que follamos _Asegura. Enarco una ceja. Eso se llama jugar sucio, muy sucio. Si yo soy sincera con él, ¿qué le cuesta ser recíproco conmigo? Además ya comenzó a tratarme de usted nuevamente.

-Sí, usted me gusta, teniente. Me gusta mucho.

-Debo agregar para evitar malos entendidos en el futuro que eso no cambia nada. Seguimos siendo el coronel y la teniente. Soy su jefe y usted mi subordinada. Nos hemos permitido ciertas cosas, pero no quiero que se haga ilusiones con algo que nunca sucedrá _Dice y asiento. Si quieren saber como armar y romper en dos minutos a alguien definitivamente deberían ser como Christopher Morgan.

-No tienes que repetirlo tantas veces, ¿sabes? _Agrego. Es sumamente frustrante la situación. Pego mi frente a la suya.

-No quiero que se le olvide, teniente _Susurra sobre mis labios, robándome parte de mi autocontrol. Estamos en desigualdad de condiciones.

-No serás tú el que quiere tenerlo presente siempre _Refuto y sonríe.

-Tengo excelente memoria _Responde. Ruedo los ojos, en eso sí que discrepamos. ¡Por dios! Estoy frente a él y no es capaz de reconocerme.

-Mañana regresaremos a patearle el trasero a Antoni _Agrega y asiento.

-Sí _Musito.

-Quiero que pelee a mi lado, teniente. Es buena en lo que hace y sería de mayor utilidad si se une al grupo élite _Dice. Mis ojos brillan al escuchar sus palabras.

-Eso me encantaría _Admito.

-Ahora mismo me apetece otra cosa que no está relacionada con el comando y mucho menos con Antoni _Me hace saber lo que quiere. Mis piernas rodean sus caderas, quito su camisa y sonrío.

-Puedo asegurar que ya lo sabes _Inquirío. Une sus labios a los míos, sus besos envían sesanciones por todo mi cuerpo. Debo decir que el día acaba de dar un giro de 180 grados y que no va a terminar ni remotamente cerca de como me lo había imaginado.

.....

Es momento de volver a la realidad. Londres, quería regresar, sabía que tenía que hacerlo para poder enfocarme completamente en lo que verdadermamente importa: Atrapar a Antoni Macherano. Ni en mis sueños más locos hubiera imaginado que traicionaría a mi hermano, me justifico al pensar que él se lo merece. Lena se sienta a mi lado.

-¿Se puede saber dónde estuviste ayer? Te busqué por todas partes _Cuestionó. Me acomodé en el asiento.

-Tuve un pequeño problema _Respondo, me encojo de hombros oara restarle importancia.

-Estuve pensándolo bien _Agrega, obtiene toda mi atención con sus palabras.

-Lo tendré _Susurra.

-Eso es maravilloso.