Prohibido Enamorarte Del Enemigo

Capítulo XVII.- ¿Quién Es Ese Chico?

Kagome adolorida por la caída y al ver sus papeles tirados en el piso. —No puede ser tanto que tarde en poner estos papales en orden, ella no se fijó quien la había hecho caer solo se preocupaba por aquella papelería.

— ¡Discúlpeme señorita! —aquel chico tendió su mano para ayudarla a levantar.

—Mire lo que ha hecho, ¿Por no fijarse por donde va? —musitó aquella chica de cabello azabache.

—No te preocupes preciosa yo te ayudo. —dijo aquel chico sin dejar de mirarla ya que con la mirada la vio de arriba abajo. —Vaya esta chica es muy bonita a demás tienes ojos muy hermosos. —pensó para sí mismo aquel chico de ojos color café y cabello castaño.

La azabache se sonrojo levemente ya que se fijó como aquel chico la miraba. — ¡Que te vas a quedar ahí parado o que no me vas ayudar a recoger mis papeles! —replicó aquella chica un poco molesta con aquel chico.

—Sí, si claro señorita—el ayudo aquella chica de ojos color chocolate a recoger sus papeles, entro los dos los recogieron.Aquel chico le da la parte que levanto y le dijo aquella chica —Te vuelvo a pedir otra disculpa, y es más si quieres te ayudo a acomodarlas en orden.

—No, gracias creo que ya hiciste bastante por hoy, y gracias por ayudarme a recogerlas. —Kagome subió al elevador.

Ese joven sorprendido por la actitud de aquella chica hacia el—Vaya esta señorita sí que es bastante enojona, ya debería casarse. —Es la primera chica que me desprecia y me habla de esa manera, aunque sea así es muy hermosa, nunca la había visto por aquí.

Él se dirigió a una oficina en específico, pero en no vio a nadie afuera del escritorio de ahí en eso llego aquella chica de ojos rojizos y cabello negro.

—Buen día señorita Taira.

—¡Hola! Buen día joven Murakami.

—¡Disculpa! Y Sesshomaru ¿Dónde está?

—Aun no llega, pero si gustas puedes pasar a su oficina no creo que tarde.

—¡Gracias linda! —El entro a la oficina y se sentó en el sofá que estaba ahí.

Mientras por otro lado Kagome estaba sacando las copias y acomodando nuevamente la papelería y recordó aquel chico de ojos cafés y se sonrojo ya que sintió como la miraba. –Ojalá no lo vuelva a ver parece que es un pervertido.

Estaba tan sumergida en sus pensamientos cuando le hablan era una vos conocida para ella la saco repentinamente y miro atrás, era aquel chico de ojos azules y piel morena.—¡Bankotsu!

—¡Hola! Kagome, veo que estás ya con tus labores a temprana hora.

—Si, Bankotsu. —ella no podía evitar aquel sentimiento hacia el , su corazón latía más de lo normal y se sonroja levemente.

Bankotsu la miro y se acercó a ella poniendo su mano en la frente de la joven—¿Qué te pasa Kagome acaso tienes fiebre?

—No, no estoy bien.

En eso una de la secretaria le habla a Bankotsu —Joven Hayashi le hablan por teléfono el comandante Asagiri.

—Ahora voy señorita Hanazawa.

—Nos vemos al rato Kagome.

—Sí. —Él se retiró, mientras ella acabo de sacar sus copias ya que eran las nueve treinta ya se había tardado un poco por culpa de aquel chico de cabello castaño.

Mientras tanto llega el alvino a su oficina y no mira por ningún lado a la señorita Makino. — ¿Dónde estará?

Kagura que estaba ahí, se levantó de su asiento y se dirigió a él. —Buen día Sesshomaru.