¿Quién eres? (YM) EDITANDO-CAP. FINALES 🔓

13

TRECE

—Calma, calma, solo fue una pesadilla ya estoy contigo —dijo el pelinegro mientras mantenía abrazado a su sobrino.

—Quiero al tío Jimin, quiero al tío Jimin, quiero al tío Jimin —repitió una y otra vez en medio de su llanto el pequeño Taehyung después de despertar asustado por aquella pesadilla.

—Está durmiendo, trata de hacer lo mismo —indicó pero apenas dejó el cuerpo del pequeño en la cama este salió corriendo de su habitación.

—Taehyung, ven acá —gritó mientras caminaba detrás de él.

—Tío, diles que abran la puerta —ordenó pues habían dos hombres que le prohibieron entrar.

—Ya es tarde, regresa a la cama.

—No quiero, el moustro va atraparte —mencionó mientras sus lágrimas volvían hacerse presente.

—Solo fue una pesadilla, me quedaré contigo hasta que duermas.

—No, quiero al tío Jimin —pidió una vez más incrementado su llanto mientras seguía moviendo la manija de la puerta.

—Déjame ir a despertarlo, espera aquí —dijo rendido y el castaño asintió.

Jimin que ya se había despertado debido a los ruidos se preguntaba que sucedía afuera, tenía aún sus ojos adormilados mientras se los restregaba con la manga de su camisa. El sueño que tenía era grande ya que apenas hace un par de horas lo habían regresado a la habitación pero nada se comparaba con el dolor en su cuerpo.

Y como si no fuera suficiente vio ingresar a Yoongi haciendo que su sueño y pereza se esfumaran, se levantó de prisa con intenciones de encerrarse en el baño no tomando en cuenta que la cadena se lo impediría.

—¿A dónde vas pequeña rata? —preguntó molesto mientras lo sujetaba del brazo.

—¡Auch! Aún me duele, señor Min —expresó con evidente dolor en su rostro.

—Taehyung está asustado y quiere verte, cuida lo que haces —advirtió mientras seguía ejerciendo presión en el adolorido brazo del rubio.

—No le haré nada, lo prometo.

—Bien porque sabes lo que te haré si llegas a lastimarlo.

—Me agrada, sería incapaz de hacerle daño a un niño —dijo asustado pues la mirada de aquel hombre lo intimidaba.

—Entonces, siéntate —ordenó. Yoongi se dirigió a la puerta y apenas la abrió vio a Taehyung correr a los brazos de Jimin mientras lloraba.

—Tío Jimin, tengo miedo —confesó asustado.

—Tranquilo, Tae —susurró acariciando su espalda—. ¿Qué te asustó? —preguntó viendo al pelinegro sentarse en un pequeño sillón que estaba en una esquina.

—El moustro va atraparme, tío Jimin —lloró.

—Sshhh, Shhh, está bien, no pasa nada —dijo para levantarse a mecer el cuerpo del pequeño pero eso alarmó a Yoongi que se había levantado al instante pero al ver la acción del rubio volvió a su lugar.

—¿Puedes contarme un cuento, tío Jimin? —pidió el castaño.

—Claro, hay uno que siempre solía contarme mi mamá —mencionó con una sonrisa mientras se acomodaba en la cama con Taehyung aferrándose a su torso.

El pequeño escuchaba atentamente la historia, Jimin incluso hacía ruidos cuando iba relatando aquel viejo cuento, se dio cuenta que los ojos del niño se iban cerrando poco a poco por lo que comenzó a tararear una melodía.

Una melodía relajante para cualquiera pero que dejó pensando a Yoongi teniendo incluso que cerrar sus ojos para tratar de recordar dónde la había escuchado.

—Señor Min —susurró Jimin tratando de llamar su atención.

—¿Qué sucede? —preguntó al abrir sus ojos totalmente frustrado por no haber podido recordar.

—Tae, ya se durmió —informó en un susurro.

Yoongi se acercó para llevarse a su sobrino a su respectiva habitación pero este soltó leves quejidos al sentir que lo estaban separando de Jimin por lo que se aferró más a su torso.

—Dejaré que se duerma contigo pero yo también lo haré —sentenció para ir al otro lado de la cama y acostarse.

—Pe...ro... —tartamudeó observando al pelinegro.

—Duérmete que dentro de unas horas amanecerá —ordenó dándose la espalda para poder dormir.

—Hoy será un largo día —pensó Jimin mientras trataba de acomodarse en la cama sin despertar al niño.

La luz del sol se colaba por la ventana hasta dar directo al rostro de las tres personas en la habitación siendo el pequeño Taehyung el primero en despertar.

—Tío Yoongi, tío Jimin, despierten —dijo mientras movía el cuerpo de ambos de un lado a otro.

—Basta, ya me levanté —expresó con pereza el pelinegro.

—Tío Jimin despierta.- siguió insistiendo.

—Mmh, ya, ya... —se quejó el otro chico.

—Tío Yoongi, comamos waffles —pidió mientras le hacía ojos de cachorrito.

—Bien.

—Vamos, tío Jimin —exclamó con emoción el menor—. Podemos pedir una con fruta y otra con helado.

—¡NO! Él no va a salir de aquí, Taehyung —farfulló el pelinegro.

—Entonces yo tampoco saldré —dijo el menor haciendo un leve puchero.

—Bien, él bajará. Ve a tu habitación a bañarte y....

—No, si me voy no dejarás que entre de nuevo —interrumpió el hablar de su tío.

—Prometo que podrás entrar, ahora ve a tu habitación —ordenó. 

—Está bien, confío en tus palabras tío —contestó resignado el castaño.

Cuando el pequeño salió por la puerta Yoongi se colocó encima del rubio haciéndolo asustar, sujetó sus brazos encima de su cabeza y se acercó a su rostro.

—Bajarás pero apenas terminemos de desayunar vendrás conmigo —avisó. 

—¿Para qué? —preguntó sin añadir algo más pues tenía la respiración de Yoongi cerca de su rostro.

—Indicaciones sobre la reunión a la que asistiremos dentro de unos días y... —Se quedó en silencio unos segundos.

—¿Y? —balbuceó.

—Quizás podemos recordar viejos tiempos —susurró en su oído haciéndolo asustar y alarmar.

—Yo...

—Veamos si Jeon te complacía tanto como yo —mencionó soltando una sutil carcajada para después levantarse y salir de la habitación.

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