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TREINTA

Dedicado a : catiaiu15

—Tengo una sorpresa para ti —mencionó con una notable emoción el pelinegro. Hace unos cuantos minutos habían llegado a la mansión y Yoongi no dejó que el menor subiera hasta que lo empleados terminaran de subir todo el equipaje a la habitación de él.

—¿Es algo bueno? —preguntó bromeando y con su mano aún entrelazada al del mayor. El viaje fue bastante cansado pero mantenían la energía suficiente para estar un par de horas de pie.

—Por supuesto, sé que te gustará. Vamos —ordenó jalando su mano para subir las escaleras y dirigirse a las habitaciones de la segunda planta.

—Ahora, cierra tus ojos —indicó. Jimin un poco dudosa pero con una gran sonrisa en su rostro obedeció, escuchando segundos después el sonido de una puerta abrirse y las manos de Yoongi deslizarse por sus brazos.

—Ya puedes abrirlos —susurró en su oído y al hacerlo tanto sus ojos como su boca se abrieron debido a la sorpresa.

—¡¿Enserio?! ¡Wow! Todo está muy bonito —exclamó feliz e inmediatamente se volteó para abrazar a Yoongi del cuello.

—Muchas gracias, Yoongi —dijo dando unos pequeños saltos.

—No hay nada que agradecer, cariño. Ordené que adecuaran esta habitación para ti, sé que pronto tendrás tu audición y quise que tuvieras donde practicar.

—El espacio es perfecto, el espejo, el piso incluso las paredes están pintadas de mi color favorito. Muchas gracias, enserio me gusta mucho —dijo para nuevamente volver a enredar sus brazos en el cuello de Yoongi mientras este colocaba sus manos en la espalda baja de él. 

—¿Quieres que te consiga un entrenador o prefieres hacerlo por tu cuenta? —preguntó acariciando su mejilla.

—Puedo entrenar solo, ya quedan dos semanas para mi audición así que no creo que sea necesario.

—Está bien, trata de no exigirte demasiado y descansar.

—Lo prometo. ¿Podemos ir a dormir? —Ya la emoción había disminuido ocasionando que su sueño regresara.

—Claro. Por cierto, Taehyung vendrá mañana a pasar la tarde con nosotros.

—Entonces le prepararé unas deliciosas galletas. A él le encantan las de chocolate pero a ti las de vainilla así que tendré que empezar desde temprano.

—No es necesario que tú lo hagas, puedes pedírselo a la señora Kang o alguna de las otras empleadas.

—No, quiero hacerlo yo mismo para ustedes —contestó pero un ligero bostezo escapó de sus labios contagiando su pereza al pelinegro.

—Vamos a dormir, tengo mucho sueño —pidió recostando su cabeza en el cálido pecho de Yoongi y este tomó su mano para guiarlo hasta la habitación de él que desde ese momento pasó a ser de ambos.

Durante su estadía en París habían compartido junto al pequeño Taehyung la misma cama ya que esta era amplia y después de que quedaran solos siguieron con la misma rutina sin ningún inconveniente ni vergüenza porque Yoongi respetaba su espacio siendo acortado solamente cuando Jimin tomaba la iniciativa de acercarse.

—Tu viaje está programado para mañana antes del anochecer —mencionó acariciando su cabello rubio con el fin de que conciliara el sueño más rápido.

—Tan pronto —comentó bostezando mientras se aferraba más al torso de su acompañante ya que se encontraba reposando su cabeza y parte de su cuerpo sobre él.

¿Quién eres? (YM) EDITANDO-CAP. FINALES 🔓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora