veintisiete

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Narra Marco.

Un año más tarde.

Ya ha pasado algo más de un año, casi dos años, desde que Gala y yo estamos juntos. Ella para mí, es una de las personas más importantes de mi vida, la que siempre ha estado y sé que siempre va a estar para todo, tanto lo bueno como lo malo.

Todos estos meses han habido muchos momentos, casi todos buenos pero también malos. Momentos que la vida te pone porque la vida es eso un reto de pruebas en las que intentas llevarlo todo bien.

También ha habido momentos malos en el equipo, momentos en los que quizás no he sabido como llevar la situación al igual que Gala pero apoyándonos entre los dos, lo hemos sabido llevar bien.

Ya llevo dándole vuelta a la cabeza desde hace tiempo de hacerle una propuesta a Gala y creo que el día ya ha llegado.

Hoy jugamos un partido importante, no es un partido amistoso ni nada de eso, sino que es un partido en la que nos estamos ganando una copa, la supercopa de España. Contra nuestro rival, el barcelona, un clásico. Aún recuerdo cuando el barcelona me intentó fichar pero mi sueño era ser jugador del Real Madrid y mi sueño se ha cumplido. Desde pequeño tanto Igor como yo nos vestiamos con las camisetas del Real Madrid, veíamos todos los partidos y por supuesto un día que jamás olvidaré  cuando nos encontramos a Florentino Pérez y mi madre converso con él, ese día jamás se me olvidará.

Estamos concentrados en valdevebas todos los jugadores, entrenadores y cuerpo técnico. Gala llegará más tarde.

Llaman a la puerta de mi habitación de la residencia de aquí y me levanto abrir para encontrarme a Isco, Nacho, Lucas y Dani.

- pasad - digo para luego cerrar la puerta. - y bien, ¿qué hacéis aquí?.

- ahhh que nos estás echando - dice Isco mirándome serio.

- vámonos gente, Marco nos echa - dice Lucas levantandose de mi cama. Por toda la cara, se apodera de ella.

- no hombre, simplemente no os esperaba que estuvierais aquí en mi habitación. - aclaro.

- venimos a hablar contigo - dice Nacho y yo levanto una ceja.

- ajam y es muy importante - dice Dani.

- no sé de que trata así que ya podéis ir soltando por esas boquitas.

- ¿vas a ser lo que llevas pensando desde hace meses? - preguntan al unísono.

- puede ser. - digo con una sonrisilla. - Solo si ganamos.

- bien ahí bro - dice Isco chocando los cinco.

- me gusta, yo lo acepto - dice Nacho y reímos.

- y ahora después de esta confesión, vamos a jugar a un parchís. - dice Lucas.

Después de finalizar la partida de parchís en la que por supuesto he ganado, nos llaman para comer.

Salimos hacia el comedor y nos sentamos. Escuchamos la puerta principal abrirse y todos miramos hacia esa dirección y allí me encuentro a la chica que tanto amo, con su sonrisa que tanto me ilumina el alma y hablando por teléfono mientras se ríe de algo, sonrío como un tonto al verla.

- un cubo para las babas de Marco por favor - dice Lucas en alto y todas las miradas van dirigidas a mi, el salón estalla en risas y en ellas también se une la de mi chica que me busca con la mirada para luego guiñarme un ojo.

Termina de hablar por teléfono y se acerca hacia dónde estamos nosotros.

- hola chicos. - saluda.

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