Papá por Accidente.

Capitulo 9

-Eres un tonto -bufó Diego en el auto.

-¿Por qué?

-Porque dejaste a mamá sóla -mi cara se volvió roja.

-¿Eso crees? -preguntó él. Lo miré por el espejo y pude ver la furia en su rostro.

-León se va a desepcionar de lo tonto que es -me dijo Diego.

-Diego no soy idiota ni tonto, yo no tenía idea que ustedes estaban.

-Por eso eres un idiota.

-Diego él no es idiota -hablé tranquila. Tener a Jorge es lo mismo que tener a León en la parte de atrás junto a Diego.

-¿Lo defiendes? -gritó Diego.

-¡Diego Stoessel deja de decir estupideces!

-¿Stoessel? -preguntó Jorge.

-¿Qué? ¿Querías que tuviera tu apellido? no sabes si quiera en que escuela voy -gruñó.

-¡Ah! -exlamó Jorge.

Finalmente llegamos a la casa de los Blanco. Nunca había venido acá, yo sólo había estado en la de Holmes Chapel.

-¡Diego! -gritó León corriendo a los brazos de su hermano.

-Me duele -susurró Diego con la mano en su cabeza.

-Lo siento -murmuró León- Hola, Jorge.

León estiró su mano para dársela a Jorge quien la aceptó dudoso.

-Nos vamos ahora -dije.

-¡No, mamá tienes que ver la televiosión que tienen! -exclamó León- Es gigante -movió sus manos en el aire- Y tienen el PS4 en el cuarto de Jorge.

-Oh claro podías pasar a mi cuarto -bufó Jorge.

-Pasan al mío todos los días, no molestes por eso.

-Diego, ven un momento -lo llamó Jorge.

-No.

-Diego -dijo.

-Bien -aceptó a regañadientes.

-¿Cómo estás? -le pregunté a León.

-Genial -susurró mirando la gran casa.

-León yo no... no te acostumbres a todo esto ¿Bien?

-¿Por qué? Cecilia me dijo que todo era de Jorge y si él es nuestro papá debería...

-No lo hagas -le pedí- pequeño si tu quieres algo puedes pedírmelo, quizás me demore algunos meses pero lo tendrás lo juro -le ofrecí mi mano.

¿Estaba haciendo las cosas mal? Quizás soy egoísta y tengo miedo que me los chicos no me quieran más. Joder ¿Qué estoy pensando?

-Esto es tan genial -dijo mirando otra vez la casa.

-Si estudias tendrás todo esto -lo miré con una sonrisa.

-Pero no quiero estudiar.

De pronto sentimos las risas de Jorge y Diego.

-¿Qué hay mamá? -preguntó Diego feliz.

-¿Qué le hiciste? -dije mirando a Jorge.

-Nada -sonrió.

-Vamos -empujé a los chicos al auto- agradécele a tu mamá de mi parte, Jorge.

-Claro -sonrió.

(...)

-Jorge está aquí -susurró Mechi asomando su cabeza en mi oficina.