Capítulo 4: La figura encapuchada

567 58 0
                                    

Las horas pasaron y ni una señal de que mis captores tuvieran la intención de volver. Eventualmente el sueño me ganó y me quedé dormido, no se por cuanto tiempo, hasta que unos sonidos extraños me despertaron.

Del exterior provenían ruidos metálitalicos, voces lejanas gritando a viva voz y hasta explosiones. Sin lugar a dudas, algo estaba ocurriendo afuera.

Los sonidos continuaron, aveces haciendose más fuertes y otras veces pareciendo más lejanos. ¿Que estaría pasando afuera? La curiosidad y un poco de temor me inundaron. Talvez eran los heroes o talvez era una guerra entre pandillas. En el primer caso estaba salvado en el segundo... bueno solo digamos que si me encontraban estaba frito, BIEN frito.

Justo cuando pensamientos horrendos y tenebrosos de lo que podrían hacerme aparecían en mi mente un grito más fuerte se oyó justo frente a la puerta de mi celda. Era el grito de un hombre pero no uno de guerra, sino uno aterrado. Un humo negro comenzó a filtrarse por debajo de la puerta de la celda pero no era un humo común. Mientras que las leyes de la ciencia dicen que el humo normal sube, este se quedaba al raz del suelo, como una bruma oscura, casi opaca.

¡Eso debía ser una broma! ¡¿En dónde se ha visto que cuando alguién piensa en cosas aterradoras, estas se materialicen frente a ti?!

El hombre que había gritado antes pareció irse corriendo por el pasillo mientras el ruido de otras pisadas se acercaba y con ellas más humo llegaba. Cada célula de mi cuerpo irradiaba curiosidad por lo que se encontraba del otro lado de la puerta al mismo tiempo que rogaba por que no intentara entrar aquí.

Sigue de largo. Sigue de largo. Porfavor sigue de largo. Me repetía mentalmente. Sin embargo hoy no era el día para que el universo me escuchara. Las pisadas se detuvieron justo frente a mi celda y un ruido metálico en la cerradura indicó que alguién intentaba entrar. Y lo logró.

La puerta se abrió completamente dejando ver a una figura oscura, vestida de negro y encapuchada. El humo sobrenatural se desprendía de ella como si su cuerpo estuviera produciéndolo.

Me alejé lo más que pude de la figura sombría pero me negué a mostrar cualquier señal de terror, enarboré mi expresión fria y distante habitual. Solo yo sé que ese velo de seriedad y aburrimiento es un escudo para protejerme de todo lo que enrealidad siento. En este momento, estoy muerto de miedo.

Sin embargo, lo que realmente paso me asombró. La figura se agachó junto a mi y rompió todas mis cadenas, aún no entiendo como, usando el humo para luego dirigirse a mí con una única palabra:

-- Sígueme.

Cambio de Bando - Shinsou x reader - BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora