Capítulo 8

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Cuando me despierto la celda sigue igual, no hay nada nuevo, la cama con correas sigue en el mismo sitio y yo estoy en una esquina. Me toco la cabeza y no siento mi pelo y luego me acuerdo de que me han afeitado la cabeza. Es entonces cuando escucho a Peeta llorar.
- Peeta, ¿estás bien? ¿Qué tal fue la entrevista?
- Fatal... Cuando llegué allí y vi el traje que me tenía que poner... Un traje blanco con una especie de corbata con el símbolo del Capitolio... Fue demasiado. Parece estúpido pero pensaba que si me veían con la ropa que llevamos pues los distritos sabrían que me están obligando pero me negué a vestirme como un lacayo de Snow.
- Entonces, ¿no hiciste la entrevista? Estuviste fuera casi 3 horas.
- Sí que la hice pero como me negué en el último momento me obligaron a hacerla. Me dieron latigazos, por todo el cuerpo excepto la cara y las manos... ¿Qué te hicieron a ti? Después de mi entrevista vi a Snow y a los agentes de la paz venir a tu celda.
- Pues me hicieron la misma propuesta que a ti pero me negué y...- se me quiebra la voz- Me afeitaron la cabeza y me violaron...- no puedo más y empiezo a llorar.
- Johanna, no llores, nos sacarán de aquí, ya verás.
En ese momento entra Lilly con una cara de enfado increíble y lleva en sus manos la bandeja con la comida.
"¡Johanna! ¿Es verdad lo que te han hecho esos cabrones?"
Asiento, nunca la había visto así de enfadada.
"Es increíble... Tomate esto"
Y saca de su bolsillo dos pastillas, una la conozco, es la que me tomo para el dolor muscular, por las descargas eléctricas, pero la otra no tengo ni idea. Lilly, al ver mi cara mientras miraba la pastilla empieza a escribir en la pizarra.
"Es una píldora del día después", me mira con cara triste.
Me la tomo inmediatamente. Lo único que me faltaba era quedarme embarazada de algún imbécil de esos.
Estuve esperando en mi celda pero no aparecieron lo agentes de la paz y lo agradecí mucho, no creo que mi cuerpo pudiera aguantar otra noche de descargas. Pero mi tranquilidad dura muy poco porque es entonces cuando escucho la puerta de Annie abrirse.
Inmediatamente pego la oreja a la pared colindante con su celda. Solo escucho a Annie y a un agente de la paz gritar. ¡Joder!
Vuelvo a escuchar su puerta, lo que me indica que ya se han ido los agentes de la paz. Annie está llorando.
- ¡Annie! ¿Qué te han hecho? ¿Estás bien?
- No, Johanna, no estoy bien. Quiero salir de aquí... Quiero irme...- se pone a llorar, esta vez más fuerte y comprendo que es mejor dejarla. Le preguntaré a Lilly cuando vuelva.
Me despierto por el ruido de mi celda abrirse, estoy preparada para defenderme pero, afortunadamente, es Lilly la que acaba de entrar.
- ¡Lilly! Menos mal que estás aquí, ¿cómo está Annie?
Su rostro se transforma y se vuelve triste, muy triste.
"Johanna, Annie se enteró de lo que te hicieron el otro día y le plantó cara a Snow..." , borra la pizarra y sigue escribiendo.
"Dijo que era un cobarde que se escondía detrás de sus lacayos y ayer fue Snow personalmente a su celda", borra otra vez.
"Le dieron latigazos, descargas y...", deja de escribir y se le cae una lágrima.
- Lilly por favor sigue contándomelo...
"Le dieron patadas en el vientre"
En ese momento mi corazón se para y noto que mis ojos están llenos de lágrimas.
"Ha sufrido un aborto, lo siento"
Entonces las lágrimas que estaba reteniendo empiezan a brotar sin control. Me quedo llorando en una esquina hasta que veo que Lilly está a mi lado, intentando consolarme pero ella también está llorando. Le ha cogido mucho cariño a Annie.
Han pasado unas 4 horas y estoy en la misma postura, intentando asimilarlo todo, intentando dejar de llorar pero me es imposible porque estoy escuchando a Annie llorar todo el rato y lo peor es que no puedo hacer nada para consolarla.
El hijo de Finnick, mi amigo de la infancia, y de Annie, a la que debía proteger, ha muerto porque Annie intentó defenderme. No puedo soportarlo, sin pensarlo dos veces cojo el cuchillo que me dio Lilly la primera semana para protegerme y que tengo escondido debajo de un panel del suelo y me lo clavo en el vientre. Todo se vuelve oscuro.
Cuando abro los ojos, tengo el vientre vendado y a Lilly a mi lado poniéndome toallas de agua caliente en la cabeza. Apenas puedo moverme y el dolor es insoportable. Y la cosa no mejora cuando recuerdo que el hijo de Annie ha muerto por mi culpa. No puedo aguantar esto, son demasiadas muertes a mi cargo.
- Lilly, mátame, te lo suplico...- digo con un hilo de voz.
"Johanna tienes que ser fuerte..."
- No puedo más... No puedo moverme, me duele la cabeza y pensar que a ti te van a meter en un lío por lo del cuchillo...
"Nadie sabe lo del cuchillo, he dicho que te caíste y te diste con la esquina de la puerta del baño. Y lo de la herida he dicho que es un latigazo que se te ha infectado"
- No puedo más... No puedo...- empiezo a llorar desconsoladamente.
Entonces Lilly saca de su bolsillo un pequeño frasco que pone "Morflina" y me lo inyecta. Entonces me quedo dormida.

Johanna en SinsajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora