Johanna en Sinsajo

Capítulo 21

¡SPOILERS! Si no has leído Sinsajo y estás esperando a la película no leas este capítulo
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Tres meses hace desde que volví al distrito 7. Después de estar tanto tiempo en el 13 acompañada de gente, esto empieza a ser aburrido. Mis días son muy monótonos, demasiado. Necesito novedades o algo por el estilo. Las charlas con Haymitch son lo único que me entretienen, pero últimamente no hemos tenido muchas porque estará demasiado borracho como para llegar al teléfono, al menos eso creo yo. Suena el teléfono, parece que tenga poderes para adivinar lo que pienso.
- ¡Hola Haymitch! ¿Se te ha acabado el alcohol y has conseguido llegar al teléfono?
- No soy Haymitch, Johanna soy Annie. Creo que el bebé viene ya.
- ¿No está Delly contigo?
- Tuvo que irse al 6, su novio es de allí y le ha conseguido un buen trabajo.
- ¿Por qué no me lo dijiste? Habría ido a ayudarte
- Da igual Johanna, pero ahora sí que necesito a alguien, estoy asustada...
- ¿Se ha adelantado, no?
- En teoría me faltan 3 semanas
- Bueno, tranquilízate Annie. Llegaré esta tarde

Hago la maleta lo más rápido que puedo y corro hacia la estación. Me subo al tren y dejo la maleta en mi compartimento, confiando en llegar a tiempo al distrito 4. Me siento en mi butaca y me concentro en el paisaje que pasa rápidamente a mi lado mientras escucho el relajante sonido del tren pasando por las vías y, sin previo aviso, se me cierran los ojos.

- Señores pasajeros con destino el distrito 4 les avisamos que hemos llegado.

Cojo la maleta y miro la hora, las 4 de la tarde, Annie me llamó a las 12, igual llego a tiempo. Bajo del tren y voy corriendo al hospital. Veo a una enfermera rubia e intento alcanzarla.
- ¿La habitación de Annie Cresta?- la enfermera se da la vuelta y me resulta familiar.
- ¿Johanna? Cuánto tiempo sin verte... La habitación 348
- ¿Llego a tiempo, señora Everdeen?
- Claro que llegas a tiempo. El parto en las madres primerizas puede durar hasta 12 horas
- Vale, gracias

Llego a la habitación y entro. Me encuentro con una Annie tranquila tumbada en una camilla, que de vez en cuando pone una mueca de dolor.
- ¿Cómo vas?
- Bien, asustada. Es muy lento
- Relájate, yo estoy aquí contigo y no me he recorrido 3 distritos para irme antes de ver al crío.
- El doctor ha dicho que según la dilatación es posible que nazca sobre las 8 de la tarde
- Joder, me da tiempo a dar una vuelta turística por el 4 y todo

En ese momento entra una enfermera que le hace una revisión a Annie y yo aprovecho para llamar a Katniss porque creo que querrá estar presente cuando nazca. Llamo tres veces pero no me coge el teléfono. Iré a lo seguro y llamaré a Haymitch.
- Hola preciosa
- ¿Cómo sabes que soy yo?
- ¿Quién va a ser si no? ¿Katniss que está con depresión post-panadero? ¿Peeta que está tratándose los ataques? Bueno... ¿Qué quieres?
- Estoy en el 4. Annie se ha puesto de parto y creía que Katniss quería estar aquí.
- Pues has marcado mi número, no el de ella
- No me coge el teléfono. Dile que el parto está previsto para las 8 de la tarde.
- Como tú digas

Cuelgo y pienso en Peeta. Él también querría estar aquí. Llamaré a Aurelius.
- Doctor Aurelius, soy Johanna
- Buenas tardes Johanna, ¿qué pasa?
- Quiero que le diga a Peeta que Annie está de parto, el bebé nacerá sobre las 8. Distrito 4, habitación 348.
- De acuerdo.

Llamaría a Delly pero no me sé el número de teléfono. Entonces pienso que Peeta está con ataques, Katniss con depresión y Haymitch borracho. Me parece que voy a estar sola cuando nazca.
La enfermera sale y me dice que ha sedado a Annie para que descanse un poco, hasta dentro de 1 hora no se despertará. Voy a la cafetería del hospital y aprovecho para comer, ya que con el viaje no me ha dado tiempo. Me siento en una mesa cualquiera con mi comida y presto atención al televisor. La nueva presidenta de Panem, la presidenta Paylor está dando un discurso sobre la reconstrucción de los distritos que empezará dentro de un par de meses. "Todos los ciudadanos que quieran podrán ayudar, sin importar su edad o distrito de nacimiento, es más necesitamos apoyo", esa frase se me queda grabada. Posiblemente participe en la reconstrucción. Alejan el plano de cámara y veo que la presidenta está escoltada por dos guardias, uno de ellos es Gale, así que por eso se fue al 2.
Cuando Annie se despierta entro a la habitación y hablamos de cosas sin importancia hasta que las contracciones se volvieron tan seguidas que no podía hablar. Entonces vino el doctor y se la llevó a otra sala preparada específicamente para el parto.
No sé cuánto tiempo ha pasado desde que se llevaron a Annie, quizá dos horas y yo, a parte de que me duele todo por esa incómoda silla, estoy llegando al límite del aburrimiento. No creo que aguante mucho más. Decido ir a la cafetería ya que por lo menos hay televisión y justo cuando voy por el pasillo me encuentro con Haymitch, Katniss, Peeta y Effie.
Haymitch parece más sobrio que de costumbre; Katniss tiene un aspecto horrible, está demasiado delgada y tiene ojeras muy marcadas; Peeta tampoco está mejor, ojeras, intentando no conversar mucho con nadie, no parece el de antes; y Effie... Bueno Effie sigue exactamente igual, salvo por el vestuario, ahora lleva un vestido bastante ancho, nunca entenderé las modas del Capitolio. Yo los saludo a todos y nos sentamos en la sala de espera mientras me preguntan cosas como "¿Cuánto tiempo llevas aquí?", "¿Es niño o niña?", "¿Cómo se llamará?"... Yo intento contestar a todo lo que puedo pero hay cosas que no tengo ni idea. Entonces Haymitch me hace señas para que vayamos a otro sitio a hablar. Yo le sigo.
- ¿Cómo lo has conseguido?
- ¿Cómo he conseguido el qué?
- Que vengan todos. Katniss no ha salido de su casa desde que llegamos del 13, llevo intentando convencer a Peeta de que vuelva al 12 casi 2 meses y no he conseguido nada y ¿cómo has sacado a Effie del Capitolio?
- Yo no he hablado ni con Katniss ni con Peeta. Solo os dije a ti y a Aurelius lo del parto y a Effie ni la he llamado.
- Pues tiene su mérito, la verdad

Ya en la sala de espera me quedo pensando de que, en cierto modo, todos nos sentimos culpables de que no esté Finnick aquí y queremos acompañar a Annie. Si hace unos años me dicen que imagine este momento me lo habría imaginado exactamente igual que ahora, bueno con nosotros menos destrozados, pero cuando el bebé naciera me imagino a un Finnick sonriente enseñándonos a su hijo con una alegría desbordante. Pero vuelta a la realidad, sale un enfermero y nos dice que todo ha ido bien. Pasamos a ver a Annie que sostiene en sus brazos a un bebé precioso. Todos nos quedamos sin palabras, es Peeta quien rompe el silencio.
- ¿Cómo se llama?
- Finnick, se llama Finnick
Nos quedamos varios minutos en silencio, analizando cada movimiento del pequeño como si fuera algo extraordinario, y en cierto modo, lo era. Esta vez es Annie la que empieza a hablar.
- Johanna, ¿quieres cogerlo?
Yo asiento y ella me pasa con mucho cuidado al recién nacido. Yo me quedo mirando cada detalle del pequeño Finnick. Tiene los labios de Annie y, aunque tiene poco pelo, es de color bronce como el de su padre. De repente abre los ojos y deja al descubierto un color verde mar que me deja sin palabras.
- Es igual que Finnick.
- Sí...- dice Annie con un deje de triteza
- Me encantaría que estuviera aquí para verlo- le digo
- Seguro que lo está viendo, simplemente, lo sé.