Entre Caminantes [+18] COMPLETA ✔️

❄️ Llanto ❄️

—Aja, decidido.

—¿Qué cosa?

—No dejaré que la metas de nuevo, a menos que uses condón—declaro autoritario, secando mi cuerpo desnudo y mirando sin pudor el cuerpo de Kirian. El cual también se encuentra desnudo y mojado debido al baño que acabamos de tomar.

—¿Acaso te he lastimado?—se gira para mirarme con su ceño fruncido.

Camina a mí lanzando su toalla al suelo mientras alarga sus brazos para tomar mi rostro con ambas manos.

—Nop, pero es muy molesto quitarme tu asqueroso semen del culo.

—¿Asqueroso?

—Asqueroso.

Ahora toma mi la cintura, pegándome más a él y sonriendo de costado con diversión al oír mi humilde comentario. Esa sonrisa se me pega a los segundos que la veo, ni siquiera me molesto en ocultarla.

&No lo has probado, así que no puedes decir que es asqueroso.

—Buen punto, tendría que primero probarlo y luego dar mi veredicto, ¿no lo crees?

—Me gusta esa idea.

Kirian baja su cabeza, yo me pongo de puntillas. Juntamos nuestros labios en un corto beso, el cual poco a poco se convierte en uno más caliente, pero esta calentura dura poco debido al molesto sonido del despertador.

—Mierda.

—¿Tienes escuela?—pregunta frustrado, sin tener intención de soltar mi cintura.

—Sí y por culpa de alguien iré amanecido.

—Es verdad, controla tu lujurioso culo, Jensen.

Golpeo su antebrazo, riéndome de la idiotez que dice. Las risas, los besos y el calor inunda cada parte de la habitación. Extrañamente, ambos disfrutamos estar juntos pasando este ameno rato. Es raro, mucho, pero admito que no me desagrada.

Luego de conseguir que él me suelte, puedo ir al armario para poder vestirme lo más rápido que pueda, ya que no tengo la menor intención de bajar a desayunar y tener que ver las caras de mi familia. Mucho menos quiero soportar los comentarios sarcásticos de mamá.

—¿Oh, despertaste? Y yo que pensé que te estaban matando anoche...

—¿Y por qué pensaste eso?

&Por los putos gritos que escuché desde mi habitación.

«Sí, eso es algo que diría mamá».

—Oye, rubia, iré a la habitación de al lado para buscar algo de ropa-informa, pero luego me da una sonrisa torcida llena de malas intenciones—. Aunque pensándolo bien, supongo que a tu mamá no le moleste verme desnudo.

—Vuelves a decir algo así y te arranco con los dientes tu maldita verga larga. ¿Entiendes?

—¿Te dije lo excitado que me pone oírte hablar sucio?