Our Demons✔ [Dementia #2]

Capítulo 28

—¿Y me dices que estuviste pasando por todo esto sola? —me reprochó Tiffany llevándose su manzana a la boca después.

Habíamos ido al parque con Violet y sus amiguitos para retomar nuestra charla pendiente, aunque realmente no me apetecía.

—No quería meterlos en líos.

—¡Eres una cabeza dura, mujer!, ¿Cuántas veces tengo que decir que no me importa lo que suceda? Que debes contar conmigo pase lo que pase. A la mierda con lo riesgoso, quizá lo sea, pero no conocen de lo que es capaz Tiffany Petsch y no quieren saberlo.

—Un poco de taekwondo no puede salvarnos. —La molesté ya que ella solía hacer eso.

—No hablo de solo eso, cariño.

Me volteé a verla y ella me guiñó el ojo volviendo a arrancar con sus dientes un pedazo de la fruta que tenía en manos. Cuando dejamos de hablar distraje mi mente prestando atención a las papitas que estaba comiendo del paquete hasta que mi mirada se desvió a un arbusto que se movía. Allí, oculta entre las ramas, había una figura que no dejaba ver su rostro ya que llevaba una capucha que lo tapaba por completo. Así que sin escuchar a mi parte racional que me imploraba que me quedara quieta, me puse de pie y avancé hasta ahí. En cuanto lo hice, él empezó a alejarse y tuve que aumentar la velocidad para no perderlo de vista.

—¡Madeline! —gritó desde atrás Tiff al verme salir corriendo.

Seguí sus pasos casi pisándole los talones, iba a pocos centímetros delante mío, podía ver su espalda cubierta con un buzo gris que era el que tenía la capucha. Deslicé mi mirada por él tratando de buscar algún detalle significativo. Lo único que no estaba tapado era su mano, allí había un anillo, ¿Qué era? Un animal, una...

Avanzó más rápido, dio vuelta la esquina y maldije entre dientes apurándome, pero cuando llegué por donde se había ido ya no estaba. En su lugar había otra nota tirada en el suelo, lo suficientemente visible como para que la hallara yo.

La nota decía:

"Esta vez vamos a ser más claros, sin frases.

Estás cerca Madeline, y nosotros también.

Quizá por fin nos conozcamos, o quizá nos volvamos a ver.

¿Quién te asegura que no somos alguna de las personas que te rodean en este preciso instante? ...

Recorrí con la mirada las calles, sintiéndome indefensa e insegura.

Nos vemos."

Estaba tan afectada por el momento que cuando alguien apoyó su mano en mi hombro con dulzura yo no dudé en quitármela de encima. Mi expresión trastornada pareció asustar a Tiffany que llevaba de la mano a Violet y Michelle las cuales me observaban con ojos fisgones. Obligué a mis sentidos a relajarse ocultando el temblor de mis manos por detrás de mi espalda.