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ーChicos...ーInició el mayor de la manada, el lobo alfa. Había llevado al cachorro y al zorro al piso de abajo, e hizo que se sienten en el sillón de allí. Él tomó asiento en una silla frente a ellos y los miró con seriedad, dejando helados a los menores. Continuó con su charla.

ー¿Qué pasó? ¿Por qué gritaban ahí arriba? Las cosas que dijeron, que aunque sean sinceras y se estén expresando, hubiese sido mejor que las hayan hablando con más tranquilidad. ¿Bien? No me está gustando para nada que se lleven mal, tienen un parecido que ustedes no logran ver. Intenten verlo y traten de llevarse bien, somos todos como hermanos. ¿Está bien?ーHabló, sin levantar la voz y hablando con serenidad.

ーPero hyung, él nos rechazó y... Y... Ahora viene como si nada. No es nuestro hermano, o al menos mío no lo será.ーSe explicó Seungmin, cruzándose de brazos. Chan no quiso interrumpir sus palabras, por lo que habló después de él.

ーMinnie, tranquilo, ¿Si? Dale una segunda oportunidad, él de verdad nos necesita, y tú también sabes lo horrible que es el mundo allá afuera. Mira, planeemos mejor todo, ¿Está bien?ーPreguntó el mayor, centrando su vista en ambos menores.

ーNo, Chan hyung. Si Seungmin-ah no quiere verme por aquí nunca más, me iré para ya no molestar. Ya no quiero convivir con más personas que me odien.ーPlanteó el peliazul, mirando el suelo.

ー¿Ves? Puede irse tranquilamente y se ve que es lo que desea. Hyung, si vas a conseguir nuevos miembros, elige mejor la próxima vez.ーY para no dar más vueltas al asunto, el castaño se levantó y se fue a la terraza, sin dejar reaccionar al rubio quien dio un suspiro.

ーNo lo escuches, ¿bien? Tú puedes quedarte, no todos te odian. Siéntete como en casa, ¿si, pequeño Innie?ーSonrió y se acercó a darle un abrazo, que fue correspondido por poco tiempo.

ーSí sabes que con el 'Siéntete en casa', me dan razones para irme y no volver, ¿no?ーDijo casi sin ánimos. Todo esto hizo preocupar a el lobo.

ーOh, ¿no la pasas bien? Cuéntame, los chicos pueden esperar un momento mientras te ayudo con-...ーDejó de hablar al ver a Jeongin negar varias veces.

ーNo, hyung, vayamos con ellos. No tengo ganas de llorar este día, aunque tenga muchas.ーDijo, abrazando a su mayor para tratar de calmar sus pensamientos.

(. . .)

El siguiente en exponer fue el chico que parece conejo y gato a la vez, con un baile en el jardín de la casa, puesto a que le daba miedo si en algún momento se acercaba mucho a los bordes de la terraza y caía. Apenas aguantaba estar allí con sus amigos, quienes pusieron unas rejas algo seguras para que Minho no tenga tanto miedo. Dejando esto de lado, el intérprete del baile puso la música e inició su acto.

A medida que bailaba, su cabello bailaba con él y eso le agradaba, aunque su cara sólo estaba seria y neutra. Centrado en el baile. El resto de chicos sólo observaban sorprendidos el arte de Minho, sintiendo que en años podrían hacer algo así, excepto Felix y Hyunjin. Ellos ya estaban practicando con movimientos sueltos el baile, divirtiéndose por ser algo diferente a lo que bailan.

Viendo al pelinegro, vamos a averiguar más sobre él. Aunque no se sabe mucho de su vida allá afuera, suponen que algo terrible hicieron sus padres para que él deseara mil veces más a su tutora, que a su propia sangre. A pesar de siempre tener ese aura poco amigable y ser sarcástico, dentro de ese chico existía un alma que se preocupa mucho por sus hermanos y que los defendería a capa y espada, sin importar cual sea la adversidad. Tiene un buen corazón, cubierto por murallas que pocas veces han desaparecido, pero ya casi todos allí habían visto esfumarse para brindarles ayuda y aliento a su hoobie no tan hoobie.

Su baile fue corto, por lo que no tardó tanto en finalizarlo y que los demás se acerquen a felicitarlo, excepto Hyunjin y Jeongin. Ellos no sabían si eran bienvenidos a aquél abrazo grupal, hasta que el escorpiano los notó.

ー¡Hey! ¡Hyunjin-ah, Jeongin-ah! ¿Qué hacen ahí parados? Vengan a abrazarme, no muerdo.ーOrdenó, haciendo a ambos asentir y unirse al abrazo.

Poco después de haber finalizado el abrazo, todos subieron a comer y darse un descanso hasta que el próximo miembro mostrara su arte.

ーChico hurón, trajiste una de tus pinturas, ¿no?ーPreguntó el peliazul, comiendo un sándwich de queso y jamón, y sentándose junto a Hyunjin en el sillón.

ー¿Um? Sip, pero... Ya no estoy muy seguro de mostrarla.ーAdmitió el mayor entre ellos dos, bebiendo gaseosa de un vaso descartable blanco.

ー¿Por qué no? Si pintas muy bien. ¿Sabes? Tengo colgado en mi habitación el cuadro que te compré del hurón, y lo veo todas las noches.ーTrató de animar, sonriendo y dándole una mordida al sándwich, para luego ver el horizonte. Sus cabellos se alborotaron un poco al recibir el viento de esa dirección, que no era tan fuerte y frío.

ーAmm... Gracias, pero ya cambiando un poco de tema... ¿Qué opinas de que alguien te pinte sin tu permiso?ーAnte está pregunta, el menor volteó a ver al rubio con gran sorpresa. El segundo en nombrar, intentó pararse y huir, pero el menor tomó su mano y lo hizo responder.

ーMe pintaste, ¿verdad?ーPreguntó en un murmuro, así no daba adelanto a los demás sobre lo que Hyunjin probablemente exponga. El más alto no tuvo de otra que asentir y suspirar, soltando la mano del menor.

ーSí, espero... Que no te vaya a degradar la idea de que te haya pintado, incluso cuando siquiera nos habíamos-...ーFue interrumpido.

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-Fancy~ Shuuu~

Arte (HyunIn) [Finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora