Volvía a bailar aquella canción que, no tiene buenos recuerdos de la última vez que la bailó, puesto a que vomitó lo que había comido anteriormente. Pero ahí estaba denuevo, sólo que ahora con nervios de que Minho lo esté mirando con una cara... Terrorífica.
ーImagina que no estoy aquí, siento tus nervios en tus pasos.ーHabló aún sentado en los pies de la cama y viendo al menor, quien suspiró apenado y cansado.
Ya era la tercera vez que le repetía eso, pero no parecía funcionar, ya que le daba miedo qué pueda hacer el mayor. Como ya necesitaba descansar, para de bailar y fue a apagar la música, para luego tomar agua de una botella de las que trajeron para después de bailar. Hyunjin se sentó en el suelo, al lado del azabache.
ーPerdón, pero esa mirada que tienes sobre mí, me pone nervioso. Siento que quieres matarme.ーConfesó, con su voz algo temblorosa y evitando de verlo mucho. Minho rió por su confesión, lo que hizo fruncir el ceño al otro.
ーHyunjin-ah, no te voy a hacer nada, tranquilo. Entiendo que no nacemos sabiendo, sólo veo así para saber cuales son tus errores y ayudarte para la próxima. Pero si te pones así, todo el baile está mal, ¿entiendes?ーSe explicó, con sinceridad y sonriendo.
ーY... ¿No tienes ni un poquito de ganas de matarme por equivocarme tanto?ーPreguntó, con un poco de desconfianza y abrazando sus piernas, lo que le generó dolor, por lo que dejó de hacerlo y estiró sus piernas. No funcionó, le generó más dolor aún. Minho, al ver esto bajó al suelo con él y le ayudó a estirar bien sus piernas, para que ya no duela.
ーSí, pero me aguanto. Hoy estoy de buen humor, por lo que soy más paciente y hasta te ayudo.ーExplicó, masajeando una de las piernas de Hyunjin, quien estaba por llorar del dolor.
ーM-muchas gracias... Hyung.ー.
(. . .)
Después de como una hora, ambos terminaban de merendar, mientras charlaban sobre el club, el baile y sobre ellos mismos. Hasta que llegaron los padres de Hyunjin, quienes estaban sorprendidos con que esta vez sí era un amigo humano y no uno de peluche. La señora Hwang, se acercó discretamente hacia el comedor en donde estaban ambos jóvenes, y tomó una foto con su celular para capturar el momento tan inusual que sucedía bajo el techo de esa casa. Al sentir el flash del aparato en manos de la mayor, ambos se dieron vuelta y fueron encandilados por la salvaje luz que apareció nuevamente.
ー¡Mamá! ¡Al menos quitale el flash!ーReprochó el rubio, frotando sus ojos con sus puños. El pelinegro estaba mirando un lugar fijo, con los ojos bien abiertos y pestañeando varias veces.
ー¡Ups! Lo siento, cariño.ーSoltó la señora, acercándose a acariciar el cabello rubio de su hijo. Posa su mirada en Minho y vuelve a hablar.
ーY ¿vas a presentarme a tu amigo? Es raro que esta vez no sea un peluche.ーAnte aquello, el mayor de los jóvenes aguantó su risa y se dispuso a comer una galleta del plato frente a ellos, mientras que el contrario abrió sus ojos en grande y luego frunció el ceño con vergüenza.
ー¡M-mamá! No tenías que decir eso, me avergüenzas...ーAdmitió el más alto, formando ahora un puchero con sus labios y tomando su taza de leche tibia en sus manos.
ーOh, bien... Dejo que sigan su merienda en paz, chicos.ーDijo la señora, algo tocada por el 'me avergüenzas' que le dijo su hijo, para luego hacer una reverencia y empezar a caminar hacia las escaleras. Hyunjin levanta la vista y ve que se va.
ーN-no, ma-... Agh...ーSuspiró y luego continuó bebiendo el contenido de la taza en su mano.
ーAsí que... Peluches, eh.ーInició Minho, soltando una risa leve luego. Hyunjin guardó un momento silencio, buscando una excusa creíble.
ーEs que... Compraba nuevos peluches para sentirme menos solo, y les decía a mis padres que eran nuevos amigos porque eso eran. No sabes lo horrible que es tener miedo a hacer amigos, y tener miedo por si se interesan más en el dinero que en ti.ーAdmitió el rubio, suspirando y comiendo una galleta bañada en chocolate.
ーEn realidad, sí sé. Gracias a mi tutora y a lo que dejaron mis padres, yo también poseo bastante dinero. No tanto como el tuyo, pero bastante para tener amigos interesados.ーConfesó también, sin tomárselo muy a pecho, ya estaba conforme con los amigos que le trajo la vida.
ー¿Eh? N-no esperaba para nada este giro, y... ¿Algún día podrías contarme qué le sucedió a tus padres? Digo, sólo cuando tengas más confianza en mí y no te sientas mal por eso.ーHabló Hyunjin, parando al darse cuenta de que habló mucho. Minho soltó una pequeña risa.
ーTranquilo, a su tiempo les diré a ti y a Innie lo que sucedió, ¿bien?ーDijo el pelinegro, sonriendo y terminando el contenido de su taza con un dibujo de un gato negro.
ーEstá bien. Esperaré, hyung.ー
(. . .)
Hyunjin
¿Llegó bien, hyung?
Espero que sí ㅠㅠMinho
Estoy bien, llegué bien ㅎㅎ
No podrán acabar conmigo rápido.Hyunjin
Qué suerte :)
¿Sabes, hyung? Aveces pienso que traigo mala suerte.Minho
¿Ah? ¡¿Por qué?!
No pienses eso, Hyunjin-ah, es muy tonto este pensamiento.Hyunjin
Perdón ㅠㅠMinho
Te perdonaré si no vuelves a pensar en eso, no traes mala suerte.
¡Mira a tu alrededor, Hwang!Hyunjin
¿Era literal o no? Porque miré a mi alrededor y no había nada raro...Minho
No era literal, estúpido.Hyunjin
Ah, perdón ㅠㅠ
Un momento...
¿Cómo sabes mi apellido? No te lo dije...Minho
¿No recuerdas que tu padre es bastante conocido entre personas con dinero?Hyunjin
Oh, verdad. Lo había olvidado ㅋ ㅋMinho
¿Acaso te parece normal la enorme mansión/casa que tienes? No es de cualquiera eso.
Por cierto, Seungmin me dijo que mañana quería verte en el río Han.
Dijo que quería darte algo importante.Hyunjin
Está bien.
¿Me puedes dar su número? Necesito saber la hora y la zona exacta :)Minho
Bien~
[Seungminnie]
Disfrútalo ;)----------
Les voy a contar por qué el río Han se llama así;Chan Christopher Bang, para uno de los cumpleaños de Han Jisung, le regaló un río al que le puso Han por el apellido de su querido amigo que se había portado bien ese año, y merecía un buen y gran regalo.
Fin.
Fancy~ Shuuu~
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Arte (HyunIn) [Finalizada]
FanfictionHyunjin. Pintor que deja su talento como Hobbie. Jeongin. Sólo salía a correr por el parque, y cantar en soledad. Ambos eran tan parecidos sin conocerse aún, sólo viéndose desde un auto y la acera. Y había más personas que fueron obligados a dejar s...