Segunda Temporada de Niña Mal
•ADAPTADA•
"Sentirás que es tu mayor fortuna... Y cuando ya estés dentro, te das cuenta de que es tu mayor perdición"... Erick.
"Su insensibilidad te asombrará más que sus pensamientos"... Nina.
"Desearás matarla pero...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Maratón 3/7
La puerta se abrió y Ruggero salió.
Ruggero: No deberían estar aquí, está demasiado frío y se pueden enfermar.
Itzitery: ¿Y si nos enfermamos qué? ¡A caso no son nuestros malditos cuerpos! Preocúpese que no se le enferme su purro de sida y deje en paz a los demás —me levanté.
Gastón: Itzitery. ¿Qué te pasa? —me tomó Gastón de los hombros.
Estaba molesta porque estaba apunto de decirle a Gastón la respuesta y la respuesta no me gustaba.
Ruggero: Entren ya porque... ¡Yo lo digo! ¡Yo soy quién está a cargo aquí! —se apartó para dejarnos pasar. Gastón entró.
Gastón: ¿Vienes? —preguntó, yo negué con la cabeza.
Itzitery: Yo si quiero enfermarme es mi problema —me quité el sweater que traía puesto y luego los pantalones.
Gastón: ¡Itzitery! ¿Qué haces? —dijo Gas alarmado.
Itzitery: ¡Hago lo que se me ronque! —me quité la camisa y luego el sostén. Salí corriendo por aquel prado como loca.
Ruggero: ¡Estás loca! ¡Te vas a morir! —gritó Ruggero.
Itzitery: ¡No me voy a morir! Simplemente por el hecho que no me quiero ir a encontrar a Ruggero Pasquarelli en los infiernos —me lancé al suelo y comencé a dar vueltas como tronco.
Ruggero: ¿Su tío es psiquiatra, no? —preguntó Ruggero. Gastón se encogió de hombros—. ¡Itzitery, entra ya mismo!
Ruggero corrió hacia mí.
Itzitery: No me atrapa. ¡No me atrapa! —corrí hacia los árboles.
Ruggero: ¡Itzitery! —corría—. ¡¡Te vas a perder!! —corrí entre los árboles hasta que no ví nada más que negro, estaba todo oscuro.
Itzitery: ¡Ruggero! ¡Ruggero! ¡¡Ruggero!! —miraba para todos lados buscando la salida—. ¡Mierda! Moriré desnuda —sentí como me tomaron por detrás y me levantaron, di un grito del susto.
Ruggero: ¿Con qué muy niña mala, no? —me susurró Ruggero detrás del oído.
Itzitery: Disculpe, soy Mala Itzitery —lo abrace.
Ruggero: Loca, suicida y bipolar Itzitery, diría yo —me besó en la frente.
Itzitery: Tóqueme —susurré.
Ruggero: ¿Qué?
Itzitery: Fájeme, aquí, ahora... Ya —pedí.
Ruggero: Te vas a resfriar —se quitó la chaqueta y la puso sobre mis hombros.
Itzitery: Pues más vale que me dé calor antes que suceda en serio —tomé el cuello de su camisa y la rompí por completo dejando al aire su pecho definido.
