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¡Alto!

Antes de leer te recomiendo que revises la parte anterior ya que esto es una continuación, mil gracias por esperar 💛

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Sacudiste tu cabeza un par de veces, pellizcando entre medio de tus dedos para corroborar que todo era real y que no se trataba de un simple sueño.

- No puedo creerlo.. - terminaste de decir al paso de unos instantes, posando una de tus manos contra la pared más cercana en búsqueda de un medio de soporte.

Jimin dejó escapar un jadeo angustiado, acortando un poco la distancia.

- ¿Estás bien? - su mirada se tornó preocupada mientras te observaba.

- S-Sí.. - respondiste por lo bajo, tomando una profunda respiración antes de reunir el valor para conectar tu mirada con la que ya se posaba sobre ti - N-No puedo creer que estés aquí, seguro estoy soñando. - confesaste sin aliento, apartándote de la pared que sirvió para sostener tu peso anteriormente.

El rubio rió castamente, jugando con los diminutos dedos de sus manos.

- Tenía muchas ganas de volver, cuando vine con Yoongi-hyung no pudimos terminar de ver las exhibiciones ya que tuvimos que marcharnos a grabar algo. - explicó con detenimiento, dejando escapar un suspiro al final de su oración.

Asentiste sin emitir sonido, aún estando un tanto sorprendida de lo que estaba ocurriendo.

- Lamento escuchar eso, Jimin-ssi. - respondiste con pesar, sintiendo como el nudo en tu garganta se aligeraba.

Se encogió de hombros, antes de decir:

- No es tu culpa, no te preocupes.

Se mantuvieron un par de instantes en silencio en donde solo se dedicaron a observar a su alrededor, no encontrando las palabras adecuadas para mantener la conversación. Los segundos transcurrían y ya podías sentir tus mejillas tintándose de un tenue color rosado.

¡Vamos, habla! Recriminaba tu conciencia.

Entreabriste tus labios para comentar algo vagamente, sin embargo, te viste interrumpida por el contrario.

- E-Eh, ¿Te gustaría acompañarme a ver lo que resta del lugar? - cuestionó en un fino murmullo, percibiendo un atisbo de inseguridad en sus palabras.

Nuevamente tus labios se abrieron sorprendidos, solo que esta vez no formaron una circunferencia como la de antes.

Tus dedos recorrieron ansiosos el largo de tu cabello, antes de llevar un mechón del mismo detrás de tu oreja en un gesto que denotaba nerviosismo puro.

- No sé si sea correcto, Jimin-ssi, alguien podría reconocerte y no quiero causarte un inconveniente. - dijiste con desaliento, esbozando una mueca tristona bajo la máscara.

- No pasará nada, lo prometo. - se apresuró en decir, buscando tranquilizar los pensamientos negativos que se formaban en tu mente - Me gustaría tener un poco de compañía y sería genial poder hablar con una linda Army.

Su voz fue descendiendo conforme formulaba las palabras, concluyendo en un casto y dulce murmullo que logró provocar que tus pómulos pasaran del color rosa al rojo vivo.

- A-Ah..

El torbellino en tu mente no permitía que encontraras la respuesta indicada ante la repentina, pero gentil, invitación que el rubio hizo. Miedo e incertidumbre también formaba parte de dicha tormenta de pensamientos ya que temías que al final todo se tratara de una ensoñación que lucía y se sentía muy real, tanto que no podías creerlo.

Jimin's ReactionsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora