Jimin's Reactions

101.

Reaction a petición de:

@YongiMin19

Espero que sea de tu completo agrado, ¡gracias por leer y estar aquí!

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El aire escapaba abandonaba tus pulmones en pesadas y veloces respiraciones que escapaban de tus labios entreabiertos en repetitivos suspiros exhaustos. El sudor que cubre tu frente ocasiona que algunos mechones de cabello se peguen a tu rostro, al igual que tu ropa que se ceñía a tu cuerpo.

Te removiste incómoda sobre tu lugar, llevando la botella con agua apresuradamente a tu boca, tomando un largo sorbo del refrescante contenido.

Suspiraste aliviada cuando el líquido hizo su recorrido en el interior de tu garganta, contrarrestando la molesta sensación de sequedad.

- Ha salido bien, pero debes esforzarte más. - sentenció Yongsan, coreógrafo que se encargaba supervisar tu trabajo durante el periodo de trainee.

Sus palabras calaron profundo en ti, sintiendo como el malestar cobraba más valor.

- Lo entiendo, Yongsan-nim.. - aceptaste por lo bajo, agachando la mirada.

Sus orbes te observaron detenidamente, como si estuviese analizando algo en su conciencia.

- Necesitas ejercitarte más. - comentó abruptamente, rascando su barbilla.

Alzaste tu rostro en un movimiento veloz, observando con absoluta perplejidad al contrario.

- Y-Ya he perdido 6 kilos en estas dos semanas..

Soltaste en un débil murmullo que reflejaba lo que en tus adentros se entreteje con pesar, la decepción embarga tu pecho y estruja tu corazón dolorosamente.

Debido a la excesiva cantidad de ejercicio que realizas por día, sumándole a eso las extensas horas de prácticas que llevas por semana, había traído consigo que te encontrases más débil con cada nuevo entrenamiento, en algunas ocasiones tus piernas llegaron a flaquear; terminando con un encuentro contra el suelo o en el peor de los casos, te desvanecías completamente al concluir con las sesiones.

Que el castaño de rasgos duros mencionara que requerías ejercitarte más era como recibir una feroz bofetada contra la mejilla.

Se irguió de hombros con desdén, dirigiendo su atención a la tabla que llevaba en manos.

- Luces diferente al resto de chicas, tienes que alcanzar el peso ideal. - explicó, con poco interés.

¿Peso ideal..? cuestionó la voz de tu mente.

Solo quieren que desaparezca.

- ¿Hay algo más que deba de decirme, Yongsan-nim? - inquiriste después de unos instantes de tenso silencio.

El hombre negó grácilmente, echando un vistazo en tu dirección antes de decir:

- Un auto te espera fuera para llevarte al dormitorio, recuerda cenar lo que indica la dieta.

Asentiste sin emitir sonido, reverenciando cortamente ante el mayor, formulando a su vez una suave despedida.

Una vez concluido el entrenamiento y de haber abandonado la sala, te aseguraste de tomar todas tus pertenencias para enfundarte en una enorme sudadera que pertenecía a uno de tus mejores amigos, la calidez de la prenda contrarrestaba la fresca brisa que provenía del exterior.