02x17 "Something To Talk About"

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How to Save a Life 02x17

"Algo de Qué Hablar"

—Bien Haliah, necesito que te pongas las pilas en este momento. —entran al elevador con el paciente muriendo lentamente mientras se desangra por el daño que ocasiona el concreto en los tejidos internos del hombre— Cuando las puertas del elevador se abran, no habrá vuelta atrás, no tendremos tiempo para lavarnos, debemos entrar y abrirlo de inmediato.

—Doctora ¿No nos lavaremos?

Ambas colocan de inmediato sus respectivas cofias celestes en sus cabezas, —No hay tiempo Lee, ¿Llamaron al doctor Charles! —pregunta intrigada a las enfermeras que las acompañaban.

—Lo hicimos doctora, lo llamamos dos veces, dijo que venía de inmediato. Le dijimos que era de urgencia. —respondió una de ellas.

Entonces Bailey saca de su bolsillo gel antibacterial, lo coloca en sus manos, en grandes cantidades y luego le entrega a Haliah para que se desinfecte lo más rápido que pueda.

—Utilízalo, el gel antibacterial ayudará a esterilizar nuestras manos. —traga saliva.

Pareciera que el tiempo en el que se demora en llegar al segundo piso, en el que están los quirófanos, es eterno, cada segundo dura años.

—Y entonces ¿usted solo abrirá su abdomen y sacará el concreto? ¿Cuál es su plan doctora Bailey? —continua con el interrogatorio.

—Lo sabré cuando esté adentro.

Allí fue cuando las puertas del elevador se abrieron de par en par. Las enfermeras quitaron el freno de la camilla y corrieron llevando al paciente recostado del lado derecho, Haliah junto a Janeth, corrían tan rápido como les era posible.

Entraron al quirófano, para ese entonces las dos enfermeras ya habían recostado al paciente en la mesa del quirófano, boca arriba. Un grupo completo de asistentes de cirugía ya las esperaban, les colocaron las batas quirúrgicas de inmediato, introduciendo principalmente los brazos, luego atando los cordones tras sus cuellos.

El juego de guantes de látex fue colocado en sus manos.

— ¡Otro juego! —pidió Bailey.

Y entonces sin esperar que lo repitiera, les colocaron una segunda ronda de guantes en sus manos.

Le colocaron un pequeño banco para que ella pudiera alcanzar cómodamente al paciente, ya que su estatura era un poco reducida.

—Doctora Bailey, ¿Qué diablos sucede? ¿Qué es tan urgente como para que me sacara de una consulta en traumatología? —llega Charles, quien no se había lavado todavía.

—Preston, necesito que usted me apoye en esto. Este hombre... por alguna estúpida razón, decidió introducirse concreto líquido en su recto, y este se solidificó dentro de él. No tengo idea por qué pensó que esto sería excitante o siquiera una buena idea, pero lo que sí sé, es que cada segundo que ese concreto está dentro de él, lo está matando, mata sus tejidos internos, vasos sanguíneos, células, ¡Se desangra!

—Doctora, pierde mucha sangre, ¿Cree que pueda soportar la cirugía? Su corazón late cada vez más lento, presenta bradicardia. —Exclama Haliah— Recuento de plaquetas de noventa y dos mil por milímetro cúbico.

Cómo Salvar Una VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora