- Es un placer-
Su secretaria la llamó por el intercomunicador.
- Doctora Lucía, su cita de las ocho está aquí-
- Esperaré fuera - le dijo Alejandro.
Lucía le dio un apretón en la mano antes de dejar que se marchara. Durante la siguiente hora, no fue capaz de concentrarse en su paciente. Sus pensamientos volaban al hombre que la aguardaba fuera, y no paraban de dar vueltas a lo mucho que significaba para ella. Y a lo aborrecible que encontraba el hecho de que se marchara. Tan pronto como acabó la sesión, acompañó a su paciente a la puerta. Lisa, su secretaria estaba enseñando a Alejandro a hacer solitarios en el ordenador
- Doctora Lucía- le dijo - ¿Sabe que Alejandro no había jugado antes al solitario?-
Linda intercambió una sonrisa chispeante con Alejandro
- ¿En serio?-
Lisa se apartó de Alejandro para echar un vistazo a la agenda.
- Por cierto, su cita de las tres ha sido cancelada. Y la de las nueve ha llamado para decir que llegará unos minutos tarde-
- De acuerdo. - Lucía señaló a la puerta con el pulgar
- Mientras juegan, voy un momento al coche. Olvidé mi Palm Pilot-
Alejandro alzó la mirada.
- Yo iré-
Lucía negó con la cabeza.
- Yo puedo hacerlo-
Sin contestarle, él rodeó el escritorio de Lisa y extendió la mano para que Lucía le diera las llaves.
- Yo iré - dijo con un tono que no admitía réplicas.
Como no tenía ganas de discutir, le dio las llaves.
- Está bajo mi asiento-
-De acuerdo, no tardaré nada-
Lucía le hizo un saludo militar.
Con gesto de pocos amigos, salió de la oficina y se encaminó hacia el ascensor, al final del pasillo. Iba a apretar el botón cuando se detuvo. ¡Por los dioses!, cómo odiaba esa cosa estrecha y cuadrada. Y la idea de estar allí dentro, solo... Echó un vistazo a su alrededor y vio las escaleras. Sin dudarlo ni un instante, se dirigió hacia ellas.
Lucía estaba intentando encontrar el informe de Rachel en su maletín, pero cayó en la cuenta de que había dejado un par de archivadores en el asiento trasero del coche.
- ¿Dónde tengo hoy la cabeza? - se reprendió. Pero no hizo falta que pensara mucho la respuesta. Sus pensamientos estaban divididos entre dos hombres que habían alterado su vida por completo. Enfadada consigo misma por no ser capaz de concentrarse, cogió el maletín y salió de la consulta, detrás de Alejandro.
- ¿Dónde va, Doctora? - le preguntó Lisa.
- Me he dejado unos cuantos informes en el coche. No tardo-
Lisa asintió. Lucía se acercó al ascensor. Aún estaba rebuscando en el maletín en busca de los archivos cuando se abrieron las puertas. Sin prestar mucha atención, entró en al ascensor y, de forma automática, apretó el botón de la planta baja. Justo cuando las puertas se cerraron, se percató de que no estaba sola.
Rodney Carmichael estaba justo enfrente, mirándola fijamente.
- ¿Me vas a decir quién es él?-
Lucía se quedó helada mientras la invadían el terror y la furia. ¡Sentía deseos de despedazarlo! Pero aunque su altura fuese escasa para ser un hombre, aún le sacaba una cabeza. Y era muy inestable. Ocultando el pánico, ella le habló con calma.
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The god of sex 🔥 [Adaptación LUCIALEX]
FanfictionEsta historia no es mía, todos los créditos a su increíble autor o autora 🤍 Una Antigua Leyenda Griega Poseedor de una fuerza suprema y de un valor sin parangón, fue bendecido por los dioses, amado por los mortales y deseado por todas las mujeres q...