Capítulo 51

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De repente, se escuchó un grito sofocado tras las puertas cerradas del ascensor. Con la visión nublada por la furia y el miedo, tiró de las puertas hasta abrirlas. Y se quedó helado. No se veía el ascensor. Sólo un abismo negro, muy parecido al libro. Peor aún, bajar por allí sería como descender hacia su infierno. Un infierno oscuro, asfixiante y estrecho.

Luchó para poder respirar y superar el miedo. En su corazón, sabía que Lucía estaba allí abajo. Sola con un loco y sin nadie que la ayudara. Apretando los dientes, dio un paso hacia atrás y tomó impulsó para alcanzar de un salto los cables.

Lucía apartó a Rodney con un violento empujón.

- ¡No voy a compartirte con nadie! - gruñó él, agarrándola de nuevo por el brazo - Eres mía-

- No pertenezco a nadie - le contestó ella, propinándole un rodillazo en la entrepierna.

El hombre cayó de rodillas al suelo.

Desesperada, Lucía intentó subir por las barras laterales para poder alcanzar la trampilla del techo. Si pudiese llegar hasta allí... Rodney la agarró por la cintura y la estrelló de espaldas contra el rincón. Con el rostro contraído por la furia, colocó los brazos a ambos lados de Lucía

- ¡Dime cómo se llama el hombre que ha estado dentro de ti, Lucía! Dímelo para que sepa a quién tengo que matar-

Con una escalofriante mirada en sus ojos vacíos, comenzó a arañarse el rostro y el cuello hasta hacerse sangrar.

- ¿No sabes que eres mi mujer?. Vamos a estar juntos. Sé cómo cuidar de ti. Sé lo que necesitas. ¡Soy mucho mejor que él!-

Lucía se agachó, para alejarse un poco de él, se quitó los zapatos de tacón y los cogió. No es que fuesen las mejores armas, pero eran mejor que nada.

- ¡Quiero saber con quién has estado! - chilló él

En el mismo instante en que Rodney daba un paso hacia atrás, la trampilla se abrió. Lucía miró hacia arriba.

Alejandro se tiró desde el hueco y cayó agachado como un sigiloso depredador. Lo rodeaba un aura de peligrosa tranquilidad, pero la expresión de sus ojos era aún más terrorífica. Iluminados por la ira del infierno, estaban clavados en Rodney con mortal determinación, y lanzaban fuego. Se puso en pie lentamente, hasta enderezarse del todo. Rodney se quedó paralizado al ser consciente de la altura de Alejandro

- ¿Quién mierda eres tú?-

- El hombre con el que ella ha estado-

Rodney abrió la boca por la sorpresa.

Alejandro miró escuetamente a Lucía para asegurarse de que se encontraba sana y salva, y volvió su atención de nuevo a Rodney, lanzando un rugido. Aplastó al tipo contra la pared con tanta fuerza que Lucía pensó que habían dejado una señal en los paneles de madera. Alejandro lo agarró por la camisa y volvió a golpearlo contra la pared. Cuando habló, la frialdad de su voz hizo que Lucía se estremeciera.

- Es una pena que no seas lo suficientemente grande para poder matarte, porque quiero verte muerto - le dijo apretando los puños - Pero pequeño o no, si vuelvo a encontrarte cerca de Lucía otra vez o haces que derrame una sola lágrima más, no habrá fuerza en este mundo ni en el más allá que me impida hacerte trizas. ¡¿Lo has entendido?!-

Rodney luchó inútilmente para zafarse de los puños de Alejandro

- ¡Es mía!. Te mataré antes de que te interpongas entre nosotros-

Alejandro ladeó la cabeza como si no pudiese creer lo que acababa de oír.

- ¿Estás loco?-

Rodney lanzó una patada al vientre de Alejandro

The god of sex 🔥  [Adaptación LUCIALEX]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora