Capítulo 5. Doble susto.

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Etter.

¿En serio me dijo una frase de Terminator?

¡Está loca!

Y ¿En qué momento mandó a arreglar esta habitación?

Ignoro a la rubia borracha o eso iba a hacer hasta quela escucho hipar. Giro la manilla y noto que la muy insolente, le ha pasadoseguro. Toco la puerta y la llamo por su nombre varias veces, pero no responde.

Una arcada suena del otro lado y maldigo por tener quecuidar a mi enemiga como si fuese una niña pequeña. Ni siquiera sé cuándo seembriago.

Voy a mi habitación por las llaves de repuesto y abrosin problemas justo a tiempo para verla luchar por sentarse. Cuando logrolevantarla, me vomita.

¡La muy maldita acaba de vomitarme!

El deseo de dejarla bañada en su propio asquerosodesastre es tentador. Nos arrastro hasta el baño y nos meto bajo la ducha.

—¡Que puto asco! —Exclamo mientras ella se desliza porlas baldosas hasta el suelo y comienza a dormirse de nuevo.

La mojo de pies a cabeza y aprovecho para bañarme. Nisiquiera lo pienso y me quedo desnudo ante ella. Igual ya me vio y debe estartan mal como para ni siquiera recordar esto mañana.

Una vez termino de lavarme, procedo a hacer lo mismocon ella. Lavo su cabello y peleo con sus prendas para dejarla en ropainterior. Cuando termino, paso una toalla por mi cintura y regreso por ellarodeando su cuerpo con otra toalla.

La llevo a mi habitación, a donde no quiso dormir pormiedo a que hubiese follado con una extraña allí. Si supiera que lo hice de piecontra la pared luego de usar el sofá donde estuvo sentada, capaz no lemolestaría tanto.

Al menos la cama no la toqué.

—¡Elon! —Llamo una vez la siento en mi cama—. Debes quitarte las prendas húmedas. —Le digo.

Asiente antes de desabrochar su brassiere.Cruzo la toalla sobre su cuello para evitar ver algo. Parece algo másconcentrada y aunque lucha saca las bragas de su cuerpo.

Me alejo para traerle algo de ropa luego de ponerme unbóxer, pero al salir del armario veo que se ha acostado y arropado de pies acabeza. No lo pienso mucho y en lugar de buscar ropa en su maleta me acuesto adormir. Mañana temprano debo llamar a la esposa de Allen.

◇◇◇

—¡Despierta! —Gritan a mi lado. Quiero ignorar la vozchillona—.¡Despierta! ¡Hijo de perra abusador! —La almohada golpea mi rostro con fuerza.

Abro los ojos para ver su cara redonda y totalmenteroja.

—¿Por qué estoy en tu cama? ¿Cómo llegué aquí? ¿Porqué estoy desnuda? y ¿Qué coño me hiciste? —Me aturde a preguntas.

Hasta parece un dejavude la mañana en el hotel. Sonrío arrogante con ganas de molestarla.

—¿En serio? ¿No sabes lo que hicimos? Bueno lo quehiciste, eres toda una salvaje. Al fin hemos consolidado nuestro matrimonio¿Eh?

IMPERIO DE TITANES [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora