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Jungkook siempre soñó con ser informático, tal vez un sueño tonto para muchos que no llevaba a un futuro prospero, sin embargo su amor por las maquinas había empezado desde muy pequeño.

Su primer "amigo" de hojalata fue llamado "Ted", lo construyó con algunas latas de comida y cables, sin duda fue su primer amigo, de quien no recibió rechazos o comentarios hirientes. Con el paso del tiempo fue reconocido como un niño muy bueno en tecnología e informática, su asignatura favorita sin duda alguna.

El problema comenzó cuando veía a su hermano llegar golpeado a su casa, siempre pensó que el trabajo de Junhyun era algo difícil, ser un héroe en las calles siempre trae sus consecuencias, algunos raspones o heridas mínimas, era lo que le decía su hermano cada vez que él preguntaba. Pero después de un tiempo le vio llegando con peores golpes e incluso podía oír sus llantos del otro lado de la habitación, pero Jungkook era tan solo un niño que no entendía la crueldad del mundo al ser alguien diferente.

Aun en las noches podía oír la voz de el y constante nombre de la persona que había hecho la vida de su hermano un infierno, uno donde no solo lo arrastró a él sino también a su padre, mismo que nunca más volvió a ver después de aquella noche.


(...)

Jungkook se levantó esa mañana con un poco de mal humor, lo último que quería era ir a "trabajar" últimamente había estado saliendo con el hermoso rubio, tal vez hasta llevaban una especie de bromance, uno donde ninguno de los dos daba a torcer el brazo y eso lo mantenía alerta porque Taehyung le contaba a diario de su trabajo y de quien era mas él no podía hacerlo sinceramente y la voz de reproche de Yoongi lo seguía a todos lados cuando se trataba del rubio.

Decir que no seguía espiando a Taehyung era una gran mentira, se mantenía al tanto de lo que hacía, los lugares que visitaba frecuentemente e incluso las veces que se encontraban por casualidad para el rubio era solo una pequeña parte de lo que tenía Jungkook pensado. Se sentía mal por mentirle, por hacerle creer que tal vez existía algo cuando lo sorprendía con detalles que amaba Taehyung dentro de su ingenuidad creía que Jungkook lo adivinaba.

Sin embargo nunca sospechó todas las señales que el azabache le daba, como el hablar de computadores y software, como le explicaba el acceder a una red privada, cosas que Taehyung no entendía pero le fascinaba la manera en la que Jungkook se lo contaba.

Tal vez dentro de todo este lío había algo que el azabache no quería ver, no habían dado pasos grandes, solo pequeños como de tortuga porque Taehyung no era tan fácil de descifrar, aun así Jungkook comenzaba a desnudarlo, pero inconscientemente el también lo hacia con el rubio, aunque no quisiera aceptarlo.

Su celular sonó emitiendo un característico sonido de notificación que reconocía a diario.

Tae:

Ya casi inicia Navidad.

¡Me emociona!

Lo sé, tu época favorita es Navidad por tu cumpleaños y la nieve, pensó Jungkook antes de responder.

Kook:

¿Te gustaría ir hoy a ver los pingüinos?

Sencillas palabras que emocionaron al contrario, lo había escuchado una vez en una conversación que tuvieron Taehyung y Jimin cerca de él.

Tae:

CLARO QUE SI, TONTO.

Perdón, es la emoción del momento.


Jungkook sonrió leyendo lo ultimo, días atrás Taehyung había empezado a tener una confianza con el, que de a poco adoraba del rubio. 

Kook:

Bien, te veré en un par de horas.

Paso por ti al trabajo ;).

Tae:

Si señor xoxo.


— Sigues mintiéndole.

Jeon se giró en la silla viendo a la persona detrás de él.

— Yoongi, otra vez el mismo tema.

— No lo entiendes Jungkook, yo no puedo mentirle más a Jimin.— aseveró Yoongi a su lado.

— Estás tan metido en su culo que no sabes lo que dices.

— ¿Taehyung es solo un culo para ti?.

— No, es un buen amigo.

Yoongi frunció sus cejas, agarró al azabache de la camisa.

— A un "buen amigo" no se le miente, sobre todo cuando sabes que no es solo un amigo.

— Lo es, no me importa lo que pienses.— Murmuró apretando las manos de Yoongi en su camisa.

— Le harás daño Jungkook, sigues metiéndote en una red.

— No es tu maldito problema.

Jungkook empezó a sentirse mareado, llegando a su mente varios recuerdos borrosos.

— Soy tu amigo, pero también estoy saliendo con su mejor amigo y no quiero mentirle más.

— Solo es un estúpido culo para follar.

Yoongi se quedó quieto antes de darle una mala mirada.

— Repite eso una vez más.

— Jimin es solo un maldito culo para follar.

Min se abalanzó encima de él dándole un puñetazo en su pómulo izquierdo.

— ¡Junghyun no va a volver más, solo estás lastimando a Taehyung!.

— Es mi maldito problema a quien lastimo, imbécil.

Nunca en sus años de amistad sus peleas se habían ido a tal punto de agredirse físicamente, pero Jungkook lo tenía hasta el tope de su paciencia, siempre siguiéndolo como un perro fiel.

Se levantó organizando su ropa arrugada antes de mirar al azabache aun en el suelo.

— Después de todo lo que vivió Junhyun te importa una mierda si otra persona sufre, él no tiene la culpa porque después de todo aun no te das cuenta.

Jungkook se quedó analizando sus palabras cuando lo vio salir por la puerta escuchando el portazo al salir, su teléfono sonó una vez más con un mensaje que terminó de revolverlo todo.

Tae:

Solo quería decirte que estoy muy feliz de nuestras salidas, siempre me sorprendes con algo, estoy ansioso de verte, tonto.

De solo pensar en lastimar a Taehyung se le oprimió el pecho pero tiró a fondo esa culpabilidad, después de todo el solo marcaría un espacio de amistad con el rubio.

Aunque ese límite lo hubiera roto hace unos días atrás. 


¡YA SON 10K DE LEIDAS! La verdad estoy muy feliz, siento que es mi mayor logro de este año.

Muchas gracias por darle la oportunidad a la historia. 

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