Capitulo 42

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Abracé fuertemente a mi mamá y a mi papá, los iba a extrañar mucho y más ahora que me había acostumbrado de nuevo a su presencia, ademas no iba a mentir pues también me había acostumbrado a ver a Diego todos los días, de todas maneras ya era tiempo de que todo volviera a la normalidad así que no me quedaba de otra que aceptarlo.

-los voy a extrañar muchísimo-les dije cuando me separé de ellos.
-y nosotros a ti-dijo mi papá-pórtate bien y no te olvides de llamarnos más seguido-yo asentí-yo se que estás feliz en Sevilla pero en ocasiones olvidas que tienes familia.
-ay papá! Como crees que me voy a olvidar de ustedes-le dije mirándolo mal-es solo que en ocaciones en verdad estoy muy ocupada en mi trabajo-le dije.
-corazón-dijo Mary acercándose a mi para darme un abrazo-cuídate mucho-dijo ella sonriendo-y cuídame mucho a mi niño-dijo ella mirando a Diego.
-ay mamá!-dijo Diego rodando los ojos-no soy un niño!.
-si, ya lo se-dijo ella mirándolo en modo de advertencia-eso nunca se me va a olvidar-dijo mirándome y acaricio mi cabello, yo me sonroje al entender la indirecta mas que directa.
-no se preocupe Mary-le dije sonriendo-yo me hago cargo de que no se meta en problemas.
-te lo agradezco-me dijo ella sonriendo-y tú, recuerda lo que hablamos y lo que me prometiste-le dijo a Diego y el asintió.
-si mamá-dijo el con fastidio.
-cuídense mucho-nos dijo ahora mi papá-Diego, nos vemos pronto-dijo mi papá abrazándolo.

Nos despedimos por última vez antes de verlos desaparecer entre la gente que también iba a viajar, regresamos al auto de Diego y ambos nos fuimos a mi departamento.

-que hablaste con Mary-le pregunté después de un rato y el volteo a verme.
-sobre que?-me pregunto confundido.
-sobre lo que te dijo en el aeropuerto-le conteste con impaciente.
-no seas metiche amor-dijo el riendo y yo le di un golpe en la mano-es broma, era sobre algo relacionado con mi papá-dijo el sin darle importancia-pero no es nada grave.
-me preocupe, solo por eso te pregunté-le dije volteando a la ventanilla.
-oye, por siento estamos a pocos tiempo de que llegue navidad-me dijo el y yo la feliz pues era mi época del año favorita.
-si!-le dije sonriendo-estoy tan emocionada, sabes que navidad es lo que más amo-el volteo a verme con el ceño fruncido-aparte de ti-le aclare.
-te quería proponer algo-me dijo el.
-que cosa?.
-porque no vamos a Mexico en esa fecha?-me pregunto el sonriendo.
-no lo había pensado pero creo que sería una muy buena idea-le dije sonriendo-hace tiempo que no la pasamos tan bien.
-si, y sería nuestra primera navidad como novios-me contestó sonriendo-bueno, mi amor ya llegamos-me dijo el estacionándosela frente a mi departamento.
-no quieres pasar a tomar un café?-le pregunté pues no quería que se fuera todavía.
-claro-dijo el y ambos nos bajamos.

Cuando entramos a mi departamento prendí la calefacción y camine a la cocina para poner la cafetera, mientras tanto Diego metió mi pequeña maleta de mano a mi cuarto, yo busqué en mi alacena algo para acompañar el café pero solo encontré un paquete nuevo de galletas oreo navideñas, al no ver nada más las puse en un plato y después serví los dos cafés, camine hasta mi cuarto donde estaba Diego sentado en la cama con algo entre sus dedos.

-amor de mi vida, no tengo nada más que ofrecerte que galletas oreo y café-le dije riendo y el me sonrió-que tanto miras?-le dije mientras ponía la charola en la cómoda.
-esto-dijo mostrándome el anillo que me dio Alex y lo puso en la mesita de noche-entre y por casualidad lo vi-dijo el.
-me lo dio Alex-le dije un poco incómoda.
-si, me lo imagine-dijo el-creí que se lo habías regresado.
-lo intente pero el no quiso-le dije tratando de restarle importancia.
-bueno, dejemos ese tema de lado-dijo el poniéndose de pie para tomar su taza de café-estás galletas me gustan mucho-dijo el sonriendo-aunque no las cambio por las originales-yo me tranquilicé un poco al ver que cambio de actitud.
-quieres ver algo?-le pregunto y el se encogió de hombros.
-lo qué tu quieres estás bien.

Yo puse una película de Netflix al azar y me recosté con el a verla, la verdad que me gustaba mucho estar con el y aunque extrañaba mucho mi departamento no negaba que me iba a hacer falta estar con el, conforme los días pasaban todo tomo el rumbo diario, Diego y yo nos veíamos los fines de semana y debes en cuándo un día entre semana, eso sí prácticamente todos los días hablábamos al menos por mensaje de texto, Con Marina me había hecho muy cercana y en ocaciones saliendo de trabajar salía con ella y con Meli a tomar algo y aveces íbamos solas, ella me confesó que efectivamente estaba interesada en Alex desde que lo conoció pero el muy tonto no le hacía caso, primero por estar detrás de Sarah y después por andar detrás de otra chica que resultó que era yo, ella se lo tomo con humor al igual que yo y le prometí ayudarla con el, obviamente ella se negó pero a mi no me importó y me empeciné en ese tema, hacia un par de días el auto de Diego comenzó a fallar y le tocó dejarlo en el taller un par de días asi que yo lo llevaba a sus entrenamientos y lo recogía, como siempre el aprovechado de Diego tomo eso de pretexto para quedarse esos días en mi departamento con la excusa de que no quería que diera tantas vueltas, así que justo ahora estaba en el estacionamiento esperándolo, de pronto vi como Marina llegó en su auto lo cual me causo un poco de extrañeza, a los pocos minutos los chicos comenzaron a salir y en cuanto Alex la vio sonrió y se acercó rápidamente a ella con una enorme sonrisa, yo estaba atenta a ellos pero cuando la tuvo de frente la besó!, yo comencé a manotear de la emoción y me tape la boca para no gritar, no quería interrumpir el momento pero no pude evitar dar un manotazo al volante y el claxon sonó haciendo que todo mundo pusiera su atención en mi, yo fingí que no me di cuenta de la presencia de ellos pero cuando vi de reojo a su dirección ellos venían caminando hacia mi.

Simplemente amigos (Diego Lainez y TN )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora