Capítulo 45 | Turquía Parte 1

5.4K 261 24
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

28 de febrero del 2019

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

28 de febrero del 2019

Día 1

Estambul.

Me sentía libre, tranquila y muy cómoda.

El avión había aterrizado hace unas horas y para alegría de la mayoría llegamos a nuestro primer destino por la noche, lo cual nos permitió dirigirnos al hotel y dormir hasta que amaneciera.

Debido a las horas de vuelo, llegué exhausta y adolorida.

Pese a haber tenido a Ryan a mi lado para poder apoyarme sobre él, al aterrizar, mi cuerpo lo único que hizo fue pedirme a gritos un verdadero descanso. Afortunadamente fuimos trasladados al hotel y recibidos de la mejor manera. Compartía habitación con Madison, quien sorpresivamente no se encontraba en su cama.

No quería salir de la cama, estaba tan relajada.

— ¡A levantarse! —El fuerte sonido que Madison originó al abrir la puerta con tanta rapidez me obligó a salir de la cama y cerciorarme de que estuviese bien. Ella sonrió al ver mi estado y continuó tarareando una canción mientras abría las cortinas. Quise desfallecer a causa de la luz que se coló por las ventanas—. Hoy tenemos un itinerario muy ajustado. Tienes cinco minutos para cambiarte, diez para desayunar y uno para saludar a Ryan, lleva preguntando por ti desde que nos vimos. Eres la única que no fue al desayuno, te creíamos en coma.

Ja-Ja.

— ¿Cómo es posible que no estés cansada?

—Yo si aproveché el tiempo en el avión y dormí, no como otros —Ella no tardó en lanzarme una mirada significativa y señalarme con fastidio.

—Yo también dormí, pero los asientos no...

— ¿Los asientos? —repitió, burlona—. Querrás decir tu sesión de besuqueo con Ryan y la interminable charla en la que estaban inmersos.

—Eso no... —Guardé silencio al verla alzar una ceja y cruzarse de brazos. Parecía mi madre cuando estaba a punto de darme un discurso sobre la buena conducta y después de ello, castigarme—. No hablamos tanto.

Fuera de la Friendzone (Mejores Amigos libro #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora