En inglés: Friendzone.
En español: Zona de amigos.
En mi idioma: Mi mejor amigo me mira como a su hermanita y jamás de los jamases me verá como algo más.
Muy largo, lo sé.
Autumn siempre ha ocultado sus sentimientos, el miedo de ser rechazada po...
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Respira, Autumn. Respira.
Apreté con fuerza el volante del auto, intentando suprimir el temblor de mis manos y el nerviosismo a flor de piel. Sentía un dolor punzante en el pecho creando una grieta en mi interior, y el martilleo constante y vehemente de mi corazón no ayudaba a disminuir esa molestia.
Estaba agradecida de no encontrar tantos autos en mi camino a la casa de Ryan. Eran pasadas las once de la noche y pese a las negativas de mi tío, conseguí que aceptara cubrirme con mis padres alegando que Aaron y yo pasaríamos la noche en su casa. Mi hermano continuaba cumpliendo su palabra acerca de no separarse de mí, pero estaba segura de que estaba sufriendo a mi lado debido a mi manera de conducir.
Un recuerdo de la mañana en la que me accidenté cruzó por mi mente, tan fugaz y doloroso. Aquello me llevó a reducir la velocidad y pensar no solo en mi vida, sino también en la de Aaron, quien había perdido todo el color de su rostro y se aferraba con fuerza a su cinturón de seguridad, buscando protección y seguridad.
—Lo lamento —musito, dándole una rápida mirada antes de enfocarme en la autopista. Estaba cada vez más cerca de mi destino—. Estaba... Estoy...
—Lo entiendo, hermanita —Su mano apretó fugazmente la mía, dedicándome una pequeña sonrisa alentadora—. Quizás quieras limpiar... —señaló mi rostro.
Entonces caí en cuenta de que estaba llorando.
Limpié mis lágrimas, deseando haber borrado todo rastro de ellas.
—No te dejaré sola, Autumn —me asegura—. Pero... ¿no te parece un poco tarde ir a verlo ahora? Podría estar...
—Su madre tiene turnos extras, así que él es el único en casa. No seguiré dándole más tiempo para evitarme, nos debemos muchas explicaciones.
Me sorprendía la firmeza de mis palabras pese a que por dentro me estaba rompiendo.
— ¿Planeabas contárselo? —Lo miré confundida—. Si hubieses leído esa carta antes que Ryan, ¿cuál hubiera sido tu decisión? ¿Sigues queriendo ir a Harvard ahora que sabes que si te eligieron?
