En inglés: Friendzone.
En español: Zona de amigos.
En mi idioma: Mi mejor amigo me mira como a su hermanita y jamás de los jamases me verá como algo más.
Muy largo, lo sé.
Autumn siempre ha ocultado sus sentimientos, el miedo de ser rechazada po...
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Era mi primera vez en un concierto.
Desde que comencé a escuchar música y descubrir a asombrosos cantantes, deseé poder verlos y escucharlos en persona, pero mi madre se negó. Ella y sus locas ideas sobre morir en un concierto me impidieron tener la oportunidad de asistir a uno. Mi progenitora creía que podía perder la vida aplastada por las personas e incluso pensaba que una bomba podía estallar en el lugar y causarme la muerte, por esas razones jamás me permitió ir a uno, hasta ahora.
Sabía que mi padre no se negaría, lo complicado sería convencer a mi madre. Hanna no era fácil de persuadir, ella era muy sobreprotectora cuando se trataba de sus hijos, pero gracias a la ayuda de Kyle ella accedió a dejarme ir.
Entusiasmada, exaltada y muy nerviosa, así me encontraba.
¡Estaba por conocer a mi cantante favorito!
Que importaba si mañana tenía escuela, no me iría del concierto hasta hacerle saber a Shawn lo mucho que lo admiraba y amaba.
Sí, definitivamente haría eso.
Mis mejillas comenzaron a doler, sabía que aquello se debía a la inmensa sonrisa plasmada en mi rostro y por más que quise disminuir el dolor masajeando la zona, era imposible hacerlo. No quería borrar mi sonrisa, saber que estaba por ver a Shawn era la razón por la cual no podía borrarla. Ya sentía las incontrolables ganas de cantar sus canciones y no parar de gritar mientras nos deslumbraba con su increíble voz.
Ya quería escucharlo.
—Ni cuando te regalé la entrada sonreíste de esa forma —comentó Kyle, guiándome hacia el encuentro con nuestros amigos—. Ese Shawn hace que sonrías de esa forma, comienzo a sentirme celoso.
—Gracias —le dije, colocándome debajo de su brazo para que envuelva mis hombros. Esto se había vuelto costumbre—. Las entradas se agotaron en menos de cuatro horas y ni siquiera pude conseguir las que peor vista tienen, sin embargo tú me obsequiaste las mejores. No sé cómo lo hiciste, pero gracias. Muchas muchas gracias, Kyle.
Él me sonrió, reforzando su agarre sobre mis hombros para acercarme más a su cuerpo.
