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-¡¿Jeon ya estás listo?! Te demoras más que las mujeres.-me quejo.
-Ya dame unos segundos no encuentro mis botas negras.-dijo desde su habitación.
-Jungkook ponte cualquier zapato se nos va a ir nuestro turno.-volvi a reprochar.
-No puedo ponerme algo que no quede con mi conjunto Kya y tu muy bien lo sabes.
Y si tiene razón, no puedo ponerme un conjunto verde militar con unos zapatos rosas.
Espere unos minutos para ver a Jungkook bajar con un conjunto negro muy lindo y sus dichosas botas negras, no lo puedo negar se le ve muy guapo y sexy.
-Hey Honey, cierra tu boca van a entrar moscas.-se burló y le hice caso para terminar con un puchero.
-¿Nos vamos?-me pare del sofá y fui a tomar su mano.
Salimos de la casa para dirigirnos a la parada de autobús, a veces los taxis paran ahí, mientras que caminamos pudimos apreciar cómo las hojas de los árboles caían. Tomamos un taxi para ir al hospital donde se encuentra mi mamá, Nam nos está dando el alcance haya.
Durante todo el trayecto no decíamos nada, yo estaba metida en mis pensamientos mirando las calles por la ventana.
-Honey ya hemos llegado.-acarició mi mejilla.
-Oh si claro.-Bunny pago el taxi y bajamos.
-Por fin llegan, los estuve esperando por 20 minutos.-dijo Nam apoyado en la pared.
-No seas exagerado Nam, no nos hemos demorado ni 15 minutos, no había nada de tráfico.-sonreí leve.
-Bien entremos que esta haciendo mucho frío.-se separo de la pared y entro al hospital con los brazos cruzados para calentarse.
-Buenos días, ¿Ustedes son la familia de la paciente Kim Yeong?-se nos acercó un doctor y Nam y yo asentimos-Por favor síganme, su madre los quiere ver.
Pasamos diferentes secciones del hospital, hasta llegar a uno donde dice "Estado Crítico".
-Es aquí, habitación 6, solo pueden entrar los hijos de la paciente Kim.-nos informó el doctor.
-Si, no se preocupe puedo esperar aquí.-le dijo Bunny al doctor.
Solté la mano de Kook y tome la de Nam para ingresar al lugar, caminamos hasta la habitación 6 y con cuidado abrimos la puerta para ver a nuestra mamá echada en una camilla.
-Mamá...
-Kya... Nam, vinieron.-soltó con poca aire.
-No hables mamá, se te acaba el aire.-me acerqué a ella.
-Es necesario que hable, tengo que discúlpame con ustedes pero más con Kya.-tomo mi mano y la acaricio-Hijos perdónenme por no ser la madre que ustedes debían de tener, perdónenme si no los he cuidado como tenia que hacer, no me puedo justificar todo lo malo que te hice hija mía, no debí dejar que esos señores te tocaran, te violaran, intente estar de pie después de que su padre nos abandonara, pero no lo logré, por eso me metí en ese lado malo... Cómo dije no puedo justificarme, espero que me perdonen, los amo con todo mi corazón ustedes fueron lo mejor que me a pasado en la vida.-ví como sus lágrimas caían, las mías ya empezaban a brotar poco a poco.
