*Jayden.
No puedo creer que la noche esté tomando este rumbo, cuando me despedí de ella antes de la cena me fui con la sensación de que había rechazado mi cita de esta noche porque no quería salir conmigo, me desconcertó porque me sorprendió que me descubrí a mi mismo pensando lo mucho que me fastidiaría no interesarle a Farah, ella me está empezando a gustar mucho, me encanta estar con ella... Y me vuelve loco sus besos.
Y por fin la tengo en mi habitación, la imagen no puede ser mejor, bueno si puede, cuando ella esté en mi cama mejorará la escena.
Hago que Farah caiga en la cama, y saco mi camisa, noto como ella abre los ojos y observa curiosa mis tatuajes, alza su mano y comienza a acariciarlos, el roce de su mano en mi pecho arde.
— Tienes muchos más de los que se te ven con ropa. - dice sin apartar la vista de la línea que traza con su dedo. - me encanta es arte.
Su mano comienza a bajar hasta mi abdomen haciéndome sentir que voy a empezar a explotar de un momento a otro. A estas alturas no puedo esconder mi erección que me aprieta con fuerza dentro de los boxer.
No soporto más quiero sacarle la ropa, y con todo el autocontrol que puedo reunir comienzo meter mis manos debajo de esa camisa enorme que lleva a modo de camisón... Querría arrancarla, pero me controlo.
Su piel es tan suave, sigo la línea de sus muslos hasta sus caderas y levanto la camisa un poco más, dejo al descubierto sus piernas y su ropa interior. Aprieto con fuerza sus muslos en mis manos y los separo para hacerme hueco entre sus piernas.
Su respiración se acelera, y me acelera aún más a mi, haciendo que suba su camisa y la suba del todo dejándome ver sus pechos, no llevaba Brasier y es una suerte.
Sus pechos son perfectos y mi boca se hace agua delante de semejante tentación, la cual no resisto más y caigo en ella... Mis labios buscan ansiosamente sus pechos. Los beso y me saben a gloria, el tacto de su pezón en mi lengua hace que todo mi cuerpo palpite al instante, y siento que el de ella también, sus caderas comienzan a moverse buscando las mías, y no dudo en pegarme a ella, quiero que note lo excitado que me tiene.Muerdo sus pechos y sus dedos se enredan en mi cabello, arrancándome un gruñido. Mi mano inquieta busca su ropa interior, quiero sentirla, mis dedos se deslizan ligeramente dentro.
Está tan excitada, me encanta haber provocado esta reacción en su cuerpo, y pienso disfrutarlo.
Mi boca va ansiosa desde sus pechos hasta su boca, pasando por su cuello, hacen el mismo camino una y otra vez, beso a beso, mordisco a mordisco. Mientras mis dedos juegan a enloquecerla, quiero que gima, así que aumento el ritmo, sus ojos se cierran con fuerza y sus caderas se mueven a mí ritmo.
Ella lleva una de sus manos a su boca e intenta ahogar un gemido.
Esto provoca que mis dedos se muevan con más fuerza y le susurro.— No lo retengas preciosa, no te escondas, gime para mí.
— Jayden - dice gimiendo.- Jayden no aguanto más.
— No aguantes cielo, déjate llevar.Y ahora sí, siento sus muslos presionar, su espalda se arquea y no consigue abrir sus ojos, sus labios entreabiertos dejan escapar los gemidos más increíblemente deliciosos que haya escuchado jamás, Farah me calienta demasiado.
Ni siquiera puedo explicar lo que siento al notar su estallido de placer en mis dedos. Su cuerpo temblando de deseo es mi mayor recompensa.
Pero quiero más.
Sus mejillas encendidas tienen un tono rojizo que la hace jodidamente sexy.— Jay - susurra en un hilo de voz.
— ¿Estás bien preciosa?Acerca sus labios a mi oreja, sentir su aliento en mi cuello me pone muy excitado, voy a enloquecer de un momento a otro.
— Jayden es la primera vez que me ocurre esto, ¿Es normal?- dice con un hilo de su voz en mi oído.- así que esto es un orgasmo.
Su cabeza su hunde en mi cuello, no entiendo qué quiere decir, no me ha comentado que sea virgen, obviamente no lo es, la verdad estoy confuso.
— A que te refieres cielo- intento aclarar mi duda.
— shhhhh porfavor no pares. - súplica.Y aunque no he entendido su comentario, no importa, ahora el deseo controla mi mente y nubla mi pensamiento. Necesito estar dentro de ella, en este mismo instante.
Me incorporo y me deshago de mi boxer, estando de pie tengo mejores vistas de una delicada Farah desnuda en mi cama entre mis sábanas. No puedo remediar pensar que es la mejor escena que jamás hayan gozado mis ojos, es perfecta, ardiente.
Su mirada tímida se dirige a mi miembro erecto, yo debería sentir vergüenza quizás, pero solo siento deseo en elevadas cantidades.Busco un preservativo en la mesa de al lado y me lo pongo. Mi cuerpo se deja caer encima de ella pero intento ser cuidadoso.
— Estás segura nena. - Pregunto con la voz quebrada.
Tira de mi cuerpo hacia ella y rodea sus muslos en mis caderas. Asiente con su cabeza.
No necesito más para perder el control.
Me hundo en su interior, mi ritmo aumenta porque se siente tan bien estar dentro de ella. No es comparable.
Sus uñas se clavan en mi espalda y me enloquece, Farah va a acabar con mi autocontrol.— Dios Farah me matas.
Le gruño intentando controlarme pero me lo pone difícil. Tan difícil, que cuando siento como se contrae su orgasmo en mi miembro y grita mi nombre, arremeto con todas mis fuerzas enloquecido de placer, no aguanto más e irremediablemente estallo en un orgasmo que me deja sin aire y me hace sentir que mil voltios recorren mi cuerpo.
Caigo rendido encima de ella, que ahora me rodea con tanta ternura. Quién diría que la misma que antes arañaba mi espalda ferozmente, ahora la acaricia de la forma más delicada que exista.
¿Qué ha pasado conmigo? Esto no ha sido como el sexo que he tenido en otras ocasiones.
Mi cabeza aún da vueltas y no se asimilar, pero si sé que necesito más, quiero más.— Me encantas Farah. - alcanzo a susurrar.
Me besa en respuesta y me abraza con tanta necesidad que solo puedo envolverla en mis brazos y acunarla.
No sé dónde nos llevará esto, solo se que quiero ir a donde sea que me lleve.
😏 Este capítulo se resume en : 🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥🔥
No hay más que añadir!!! Jajajajajaja
Como siempre gracias por seguir ahí.
Muchos besos dulces 🥰💋
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El Postre Primero
RomanceCuando su pareja de toda la vida decide terminar la relación, Farah se siente totalmente pérdida. Pero todo cambia cuando conoce a Jayden, un dulce vecino con pintas de vikingo que le abrirá los ojos a un mundo nuevo de aceptación, amor y superació...