4. Pensamientos inquietos

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Hoy fue mi primer día, y a decir verdad ¡Fue muy tranquilo! Formó parte del llamado "Cuartel de los raros", ¡y es increíble! Nunca había formado parte de un grupo, todos son muy buenos y divertidos, realmente no me arrepiento de este trabajo... Aunque ahora tengo un problemilla... Me he enamorado de quien no debo, ya Kaminari se encargo de regañarme...

Flasback

—Perdóname Kami... Creo que si... Me enamoré del Licenciado Bakugou...

—Eres un tonto.—golpeo un poco fuerte la cabeza del pecoso.

—¡Ah eso duele!

—Más te vale que no empieces a entusiasmarte con imposibles Izuku... Recuerda que ya has sufrido un gran desamor, no quiero que vuelvas a pasar por lo mismo.

—Lo sé... Pero este sentimiento se quedará aquí...—llevo su mano izquierda a su pecho.—Tenlo por seguro...

Fin del Flashback

Aunque si recuerdo él fue quien me dijo que soñar no costaba nada... Ahora parte de ese sueño se hizo realidad y me hace feliz tenerlo cerca... Aunque él también se burle de mí... Simplemente me enamoré... Me enamoré del Licenciado Bakugou...—la pluma que sostenía el pecoso era rápida sobre el papel, quería plasmar lo que sentía al momento, no olvidarlo.

Pero no me haré ilusiones... No debo, ya que su mundo y el mío son totalmente diferentes... Él es demasiado guapo y yo demasiado feo, él es importante y yo solo estoy ahí existiendo... Él esta comprometido... y yo enamorado de él...¡Pero eso no significa que dejaré a un lado mis responsabilidades! Cumpliré con mi trabajo, ¡seré él mejor asistente del mundo mundial!.—con determinación, Izuku apunto esas palabras siendo eso una promesa.—Daré lo mejor de mí, nos vemos luego...Atte. Midoriya Izuku.

Izuku terminó de escribir en su pequeña libreta adornada con dibujos de gatitos donde se veían unos blancos, unos negros y otros de color anaranjado, lo guardo en su mesita de noche donde esperaba que su madre jamás metiera mano ahí.

Se dispuso al fin a acostarse, mañana sería un nuevo día de trabajo, pero no podía, ¿La razón? no dejaba de pensar en esos hermosos ojos carmesí, pensaba en ese cenizo quién era dueño de sus suspiros. Comenzó a soñar fragmentos donde tal vez podrían estar juntos, que él tomará su mano con delicadeza y la entrelazará con la suya, donde podrían correr por la playa entre risas, donde el amanecer fuera testigo de las tiernas caricias que podría grabarse en su piel... Donde sus labios se juntarán en un beso lleno de amor, ternura y calidez...Donde de esos mismos labios... Saliera la frase que siempre quiso recibir en su vida..."Te Amo".

Salió de su fantasía al recordar de pronto a aquella figura femenina de cabellos castaños.

—No seas masoquista Izuku...—se susurro para sí mismo mientras jalaba su cobija de All Might afelpada.—Jamás se podría enamorar de un pecoso nerd como tú...

Cerro sus ojos y trató de dormir, sentía felicidad y a la vez tristeza, sentía mil cosas dentro de él, pero su realidad pegaba más en él, y sabía que debía de despertar de ese bello sueño, o saldría roto de nuevo.

En otra parte de la ciudad, un departamento era alumbrado por la luz de la luna, en la cama yacía una castaña con ropas para dormir, estaba despierta y en su rostro se notaba tristeza.

En la sala del mismo departamento, un cenizo estaba sentado en el gran sofá color beige mientras sostenía entre sus manos un vaso de whisky, su rostro mostraba cansancio. Solo observaba a la nada, sin pensamientos, cuando en un momento se escucharon pasos detrás de él.

Yo soy Izuku, el pecoso nerd // KatsudekuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora