(Reig)
Sábado, 30 de octubre, 2021
Acabo de despertar y me encuentro en una silla de madera, sujetado con ataduras de cuero en los brazos y las piernas; de inmediato me he puesto a hablar en voz alta para ver si alguien responde; por tres minutos sin ninguna respuesta. No es necesario estar completamente consciente para saber que alguien me trajo aquí.
- ¡Alguien! ¡Respondan! ¿Dónde estoy? ¿Qué es lo que quieren de mí? – Grito a la nada. Solo hay una luz que entra de un agujero del techo que me ilumina. - Hilfe! Hilfe... hilfe bitte. – Del miedo que tengo, y en una rara esperanza de que Susan esté viniendo a rescatarme, también pido ayuda en alemán. Pero ni siquiera sé por qué lo hago, no hay nadie aquí que lo entienda. Ni siquiera sé si van a rescatarme justo ahora.
- ¿Qué van a hacerme?... – Pregunto sin esperar una respuesta, pero desearía que alguien me lo dijera.
El resto del lugar está bajo una sombra muy oscura. Además de una luz amarilla distante que apenas brilla. Por ese detalle y el eco que produzco al hablar, veo que la habitación es amplia. Me pregunto qué habrá sido de papá luego de esto, ¿estará buscándome?
Una gota de agua cae en mi frente, hasta ahora me he dado cuenta de que estoy ligeramente mojado por ello. Luego cae una en mi mano. Al observarla, también noto algo más en el suelo... ¿cables?
Intento mirar a mí alrededor, girando mi cabeza lo más que puedo; en efecto, hay cables que se dirigen a la luz tenue y un charco de agua a mí alrededor. No me digas que esto es una silla eléctrica.
Calmarme es imposible ahora: mi respiración se altera, puedo escuchar mis latidos en mí oído; intento zafarme en vano. Incluso las ataduras de cuero cortan mi circulación de lo tan apretadas que están. No puedo liberarme.
Escucho una puerta, una persona entra al cuarto, con una bata blanca sucia que apenas puedo ver. Parece ser un adulto, que se dirige a la luz tenue. Ahora puedo ver una mesa extraña gracias a su silueta interrumpida por ella. Simplemente se detiene allí y parece mover algo sobre ella. ¿Será el tablero de la silla?
- ¿Por qué? – pregunto. - ¿Por qué me trajeron?
No recibo respuesta.
- ¿Charles te mandó a hacer esto? – Vuelvo a preguntar.
- Oh no, para nada. - Responde en inglés una voz desde otra dirección. – Mandarlo solo sería ineficaz.
Una voz relativamente joven, firme y sobre todo intimidante. El simple hecho de escucharla me da tanto miedo que mi respiración se corta. Ahora puedo escuchar los pasos de otra persona, está acercándose con lentitud, haciendo que mi miedo aumente con cada paso que da. El sonido de cada pisada destaca gracias al eco, incluso pareciera que el resto de sonidos se ensordecieron para enfatizarlos.
Logro divisar un destello de lo que creo que es un pisa corbatas de metal. Ahora puedo ver la silueta: traje negro, delgado, alto y con un porte tan elegante como el de Silk, pero con una presencia totalmente oscura y aterradora.
Finalmente le veo la cara, provocando que la mía palidezca con solo verla; no puedo gritar, mi voz se ha ido. Ese rostro lo he visto.
- Preferí venir yo mismo. – Responde Charles.
Él guarda un gran silencio al ver mi expresión; parece estar calmado, con una sonrisa dulcemente enferma y unos ojos que manifiestan el sadismo de su persona.
- ¿Qué pasa? ¿Estás asustado? – Continúa respondiendo en inglés. A pesar de que tal vez sepa español por haber entendido mi pregunta. – No te preocupes, no muerdo como dicen ciertas personas.
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Error de Código: Autónomos
Teen FictionTres años después de un terremoto que azotó México y otros países en 2019, Meme, de 17 años, manifiesta un conjunto de poderes paranormales que la convierten en una persona poderosa y que llamó divergencia. Durante mucho tiempo vive creyendo que es...