♡Fallin' All In You♡(Kim Seokjin & Tn)

♡8♡

~Tn Adams~

–¡Qué frío! –exclamó Tae una vez bajamos del avión.

–No me digas que te afectó el calor de Miami.

–Ah, mi vida en Miami, como la extraño. –dijo suspirando haciéndose el dramático.

–Tonto. –dijo Lily, yo sólo reí.

–Bueno, iremos a dejarlos a sus casas. –dijo mi padre.

Caminamos hasta el estacionamiento en donde ya estaba el auto de mi padre pues el padre de Tae nos había hecho favor de traerlo, subimos las maletas y después nos subimos nosotros, pasamos a dejarlos y después tomamos rumbo a nuestras casas.

–Ya deja ese teléfono. –dijo mi mamá en tono de advertencia pues todo el camino no había despegado la vista de él.

–Lo siento, estoy hablando con Jin.

–Oh, ¿Cómo están las cosas por allá? –preguntó mi madre.

–Dice que todo marcha relativamente bien.

–¿Relativamente?

–Sí, resulta que uno de los accionistas de su padre resultó que lavaba el dinero.

–Oh, debe ser grave.

–Un poco, nada que no tenga solución, deben anular los contratos que tienen con él, tratar de recuperar su dinero y buscar a alguien que compre las acciones que le pertenecían.

–Bueno, y aquí es cuando me doy cuenta de que vale la pena pagar la universidad. –dijo mi padre.

Llegamos a casa y corrí hacia mi cuarto para abrir mi laptop y contestarle a Jin la videollamada.

–¡Holaa bebé! –saldé emocionada.

–Hola amor. –respondió riendo levemente por mi actitud infantil. –¿Llegaron bien?

–Perfectamente.

–Me alegro, ¿Cómo estás?

–Super cansada.

–Oh, entonces creo que debería dejarte dormir...

–No, no, quiero hablar contigo un rato, sino tendría que esperar a mañana en la noche. –hice puchero.

–Bien, niña rebelde. –dijo y rió levemente.

–Tú me pegaste lo rebelde.

–Claro, ahora es mi culpa.

–Sí.

Pasamos hablando como dos horas más hasta que Jin me obligó a colgar ya que me había visto bostezar más de veinte veces y dijo que debía descansar después de tan largo viaje, terminé por aceptar y nos despedimos.

Tomé una corta ducha y me puse mi pijama para caer dormida.

♡❣️♡

·3 semanas después·

–¿Entonces fue un flechazo? –pregunté.

–Nooo, ¡Es que tú no entiendes!¡Me enamoré! –exclamó Tae.

–Ajá...

–¡Te lo juro!

–Tae, estoy completamente segura de que no puedes enamorarte de una chica que no conoces y viste durante cinco segundos caminando en la universidad.

–¡Te digo que siii! A ver, ¿Cómo supiste que estabas enamorada de Jin?

–Eso es completamente diferente.