ES REAL ；hyunmin

𝐓𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘

Leucemia de células plasmáticas. Aparentemente, es un tipo raro de cáncer que afecta a los glóbulos blancos llamados células plasmáticas. Es extraordinariamente agresivo y resultado de la enfermedad de Kahler, en la que los glóbulos blancos infectados se acumulan en la médula de los huesos e interfieren en la producción de glóbulos normales.

O, al menos, eso es lo que me dijo Wikipedia en el teléfono móvil mientras Felix nos llevaba a casa en coche.

—Eso es lo que estaría haciendo hoy —dije mientras nos acercábamos a mi casa—. Me dijo que tenía que visitar a alguien y que me llamaría después.

Felix asintió.

Hwang Irene reveló públicamente el año pasado su lucha contra el cáncer, pero sólo cuando se filtró a la prensa sin saber cómo. Ella sonrió en una entrevista con los medios locales, riéndose de los rumores sobre su pobre salud con su marido a su lado. Parecía sana, aunque algo delgada. Sí que admitía que, aunque las vías tradicionales como la quimioterapia no habían dado el resultado esperado, era optimista con sus oportunidades y que continuaría luchando. Cuando se reía se parecía tanto a su hijo que tuve que apartar la vista de la pantalla de mi teléfono para no desmoronarme.

Recordé una pregunta que me llamó la atención. El reportero dijo:

—Hubo una leve disputa pública con su hijo, que es gay. ¿Qué tal está él llevando todo esto?

Eran buenos, los dos, su madre y su padre. No mostraban nada que no quisieran que se viera.

—Hyunjin siempre ha sido testarudo —dijo su padre—. Pero sabe que estos momentos son para la familia y que cualquier problema que podamos tener no es tan importante como esto.

—Es un buen hijo —añadió Irene, dándole una palmada a la mano de su marido.

Las últimas declaraciones que pude encontrar eran de hace cinco semanas, cuando le hicieron preguntas sobre su salud. La oficina del alcalde liberó un comunicado pidiendo respeto y privacidad durante los momentos tan difíciles, y que darían más información en cuanto se supiera algo más.

—Deja que sea él el que te lo diga —me dijo Felix antes de marcharse. Yo me quedé junto a la puerta de su coche, mirándolo—. Es obvio que por algún motivo no quería decírtelo, así que no sería bueno que dijeras nada. Puede que lo pongas a la defensiva. —Hyunjin y yo íbamos a quedar con Felix en el bar cuando saliéramos de la casa de nana, para ayudarlo con el espectáculo. Hyunjin también dijo que quería quedar con alguno de sus amigos y me pidió conocer a los míos. No tuve corazón para decirle que ya había conocido a Felix y a Bakwi y que, básicamente, eran los únicos amigos que tenía.

—Sí —murmuré—. Aún no hemos tenido esa confesión de "mi padre es un capullo fascista y mi madre se está muriendo". Esperaba que pudiéramos hacerlo la próxima semana.

Felix sacó el brazo por la ventanilla y me agarró la mano.

—Debes tener cuidado con esto —me dijo en voz baja—. No quiero parecer imbécil, pero ya suenas a que lo estás tomando como si el asunto se tratara de ti. No puedes hacer eso, Seungmin. Con esto no. La situación ya es polémica tal cual y tiene que dolerle bastante. No puedes enfadarte con él por esto. No puedes. ¿Me entiendes?