¿Café o té? L.S

Capítulo 29: Llamada de emergencia

Italia es un lugar mágico, la música, la comida, la cultura y su gente, quizás esa fue una de las cosas por las cuales Harry puso sus ojos sobre Fiorella, había tanta magia en ella, algo que más bien fue una fantasía, en cambio todo era tan real con Louis. Aunque ahora mismo estaba decepcionado de su comportamiento inmaduro y celoso, ni siquiera fue capaz de disculparse y acompañarlo antes de irse.

Suponía que todo había terminado, bebió una taza de café como de constumbre junto con un delicioso calzone de pollo con 3 diferentes quesos.

El chef del restaurante de cinco estrellas se acercó a preguntar por cómo le había parecido el plato, Harry era un buen amigo de él e incluso trabajaron juntos una vez. A lo que Harry respondió de manera amable.

—Ciao, grazie, Chef, era delizioso.

—Sono contento che ti sia piaciuto, è un piacere rivederti qui Harry Dov'è la tua ragazza Fiorella?

—Io e lei ci siamo lasciati, ma ho una relazione con qualcuno.

—Vorrei conoscere la tua nuova ragazza

—Non è una ragazza, è un fidanzato.

El cheff se sorprendió por su respuesta, pero sabía que a Harry le gustaban tanto los chicos como las chicas, así que solo podía alegrarse porque hubiera encontrado el amor de su vida.

Mientras tanto Louis bebía como loco en una discoteca, luego de sentirse como un idiota, le había enviado muchos mensajes a Harry pero él no le contestaba. Desde Instagram, WhatsApp e incluso Messenger, pero no conseguía respuesta alguna.

Un hombre con ojos grises se le acercó y lo invito a un trago, él estaba tan ebrio y con ganas de seguir tomando que lo acepto pero cuando esté hombre le pidió que fuera con él a su apartamento se negó.

—No quiero, tengo novio.

—Y no tengo problemas con eso.

—Yo sí que pena.

Se levantó de la silla y tambaleó, apenas se podía sostener todo le daba vueltas sentía como si fuera a desmayar y en medio del tumulto de gente que bailaba cayó desplomado, se escuchó un fuerte sonido cuando su cuerpo con latidos acelerados cayó, la gente se echó hacia atrás dejando espacio para ver a Louis tirado. Para su suerte, ese día Niall estaba tocando en esa discoteca y bajó de la tarima para que los guardias de seguridad ayudarán a levantarlo.

Lo sacaron de la discoteca siendo cargado por un par de hombres de piel oscura y altos.

—Hola usted ha llamado al 911 ¿Cuál es su emergencia?

—Estoy en una discoteca a las afueras de Londres y mi amigo se desplomó.

—Señor si llama para esto, es para  hacernos perder el tiempo, muchos chicos borrachos se caen en una discoteca.

—Tiene el pulso acelerado y no responde a llamados.

El hombre acuerpado le pegó una cachetada que dejó su cachete rojo y él aún así no despertaba.

—Okay deme su nombre y su dirección exacta y le mandaremos una ambulancia.

—Mi nombres es Niall Horan y...

—Oh perdone, es usted el señor Niall Horan inmediatamente enviaremos la ambulancia para su amigo.

La ambulancia llegó en 10 minutos, Louis fue subido con cada vez el pulso más lento, los paramédicos le colocaron oxígeno y supervisaban su pulso. Pararon en la clínica más cercana, quienes llevaron rápidamente a Louis por los pasillos del hospital.

Niall junto con los guardias de seguridad esperaron a recibir noticias por el estado de Louis. Un médico de barba roja salió a hablar sobre él.

—El paciente Louis Tomlinson entró hipotenso, pupilas dilatadas y con bradicardia. Parecen ser síntomas de una sobredosis ¿Saben qué drogas consumía él?

—No lo sé... Pero la verdad no creo que consumiera drogas. Él se desplomó de la nada en la discoteca, sabe doctor que a veces dan tragos con algo más allí.

—Le haremos un examen toxicológico a ver de qué se trata. Mientras tanto permanecerá en cuidados intensivos. El paciente está muy delicado.

El médico se marchó, con aquella mirada inexpresiva. Niall poco conocía a Louis pero realmente sentía preocupación por él.

Debía llamar a alguien que lo conociera bien, marcó a Harry quien bebía de un delicioso vino tinto mientras escuchaba música instrumental.

Su celular comenzó a vibrar, lo agarró para contestar.

—Hola Harry ¿Cómo estás?

—Hola Niall, cuánto tiempo sin hablar contigo, estoy muy bien ¿Y tú?

—Bueno no muy bien, estoy muy preocupado Harry.

—¿Por qué?

—Un chico que conozco está en cuidados intensivos por al parecer una droga que le dieron en la discoteca, quizás una droga que colocaron en su trago sin autorización.

—Que mal Niall.

—Si Harry, creo que debes saber que esa persona es tu novio Louis.

Harry sintió como si se le paralizara el corazón, sus manos se colocaron frías y temblorosas, a duras penas podía sostener el teléfono, una lágrima se deslizó en su mejilla.

—Lo más terrible de esto Niall es que no puedo llegar allá pronto, estoy en Italia, pero tomaré inmediatamente el primer vuelo disponible, así tenga que postergar la razón por la que vine acá.

—No te preocupes Harry, estaré al pendiente de él por ti, Louis tiene pinta de ser un chico bastante fuerte.

— Y lo es...

Louis se debatía entre la vida y la muerte, cuando de repente su pulso se hizo cada vez más lento y la máquina comenzó a soltar un pitido ensordecedor. Estaba teniendo un paro cardíaco y las enfermeras y médicos corrían atenderlo.