El futuro Heredero✔️ (BORRADOR).

CAPÍTULO DIECISIETE

Necesidad.

Nicholas

Doy un trago a mi bebida y dejo el vaso en el pequeño mini bar. De verdad no puedo creer que toda mi vida haya sido una farsa.

¿De verdad Dione se merece todo esto?

¿Estar con alguien como yo?

Mi mamá es una maldita mentirosa e interesada. Lastimó a mi padre de la peor forma, y sé que es capaz de hacerle algo a ella.

Y es la persona que más me importa, no puedo dejar que le hagan algo. No a ella.

Escucho varios golpes secos en la puerta, pero ni siquiera puedo levantarme, no quiero hacer nada en estos momentos.

-Nicholas, abre -mi pecho se detiene cuando escucho su voz.

Ella vuelve a tocar más insistente y escucho como suelta una maldición. Segundos después, ella abre la puerta y me encuentra sentado de espaldas a ella supongo. Ella la cierra y escucho sus pasos lentos acercándose a mí.

-Oye...

-Lárgate -espeto tosco.

-No hagas esto, por favor.

Me volteo hacia ella con una sonrisa amarga.

-¿Hacer qué? ¿Mandarte a la mierda?

-A mí no me hables así...

-¡NO ME IMPORTA LO QUÉ TE PASE!
-tiro el vaso de cristal a la pared y suelta un jadeo del susto- ¡Lárgate, no quiero verte!

-¡No tienes el porqué de gritarme, Nicholas! ¿Crees que yo fui la culpable de todo lo qué pasó o qué mierda?

-Pues ahora que lo sabes, más rápido deberías de tomar tus maletas y largarte lejos de aquí.

Ella hace la intención de tocarme, me lastimé la mano luego de romper el vaso contra la pared. Pero me echo hacia atrás, sé que si me toca, voy a caer, y no quiero caer.

No quiero que ella viva con un error, porque yo lo soy, mis padres solo me tuvieron por una jodida herencia. No porque realmente era deseado.

-Aléjate, no quiero volver a repetírtelo.

-No seas tan inmaduro con esto...

-¿¡Inmaduro?! -se asusta cuando elevo la voz- ¿¡Es inmaduro de mi parte saber qué nunca fui planeado, Dione?!

Ella niega lentamente.

-No es lo que quise decir.

-¡Es exactamente lo que querías decir!

-¡BASTA, NICHOLAS! -estalla- Entiendo que estés enojado por todo esto, pero yo no soy la culpable. Y por más que quieras alejarme, ¡siempre voy a estar detrás de ti!¡Asegurándome de qué estés bien y que nadie te lastime!

-No es mi problema, es el tuyo al saber que no me importa nadie -me encojo de hombros-. Sabías que algún día te iba a tratar como a todas, como una basura.