HAUNTED JADED EYES

Capítulo 40

Las últimas vacaciones habían pasado extremadamente rápido, por no decir otra cosa. Ni Severus ni Harry habían regresado a la cámara, decidiendo permanecer en los aposentos de Severus, y volver a aclimatarse a la vida, había una sensación de soledad y tranquilidad en la cámara de la que iban a tener que prescindir. Hay que admitir que probablemente era más una pérdida para Severus, que era un ermitaño por naturaleza, prefería su propia compañía, o más bien solía hacerlo, ya que ahora tenía a Harry y estaban unidos. Con cámara o sin ella, ambos continuaron su entrenamiento. Estaban firmes para decir que ninguno de los dos se oxidaría durante el nuevo año escolar, no sabían cuándo ni cómo atacaría Voldemort (como dice Severus El Señor Oscuro).

-¿Deberíamos ir a buscar el retrato y colocarlo?-. Preguntó Harry mientras se paseaba, cerrando su libro al hacerlo.

Severus buscó la pregunta registrando, -Será la última vez que tengamos la oportunidad de hacerlo antes de que lleguen los estudiantes-, Severus asintió, dando su aprobación a esa idea. Cerró la revista Potioneer y se puso de pie, de todas formas no había nada urgente que leer en la revista, ya la había leído dos veces.

-De acuerdo-, asintió Harry, dejando su libro sobre la mesa siguió a Severus fuera de sus aposentos, sus dedos se rozaron. O intentó seguir a Severus fuera, pero por alguna razón su vínculo había dejado de moverse.

-Glamour arriba-, dijo Severus con los labios crispados por la diversión, aunque sería divertidísimo ver las reacciones de todos ante el nuevo y mejorado aspecto de Harry, vendría con preguntas que Harry no quería responder. Si se descubría, destruirían la cámara sólo para deshacerse de la burbuja de tiempo, después de todo era ilegal. Casi toda la magia era considerada oscura o ilegal en estos días, era una maldita pena pero no había nada que se pudiera hacer. Ver que Harry volvía a ser lo que solía ser le hizo estremecerse un poco, sintiendo que la repulsión le subía por la columna vertebral. Tuvo que recordarse mentalmente que no se sentía atraído por los niños, Harry ya no era un adolescente, y era un hombre adulto al que Severus había llegado a amar ferozmente. No le importaba lo que pensaran los demás, e incluso si se corría la voz de que estaban unidos Harry tenía diecisiete años, técnicamente para todos los demás de todos modos, así que no estaban haciendo nada malo.

-Uy-, murmuró Harry en voz baja después de usar el hechizo para conseguir lo que deseaba.

Sólo entonces ambos salieron de los aposentos de Severus, sus dedos se deslizaron el uno del otro al separarse.

-¿Está mal esperar que Voldemort ataque pronto? Sólo quiero que termine...- Harry suspiró, mientras subían rápidamente las escaleras dirigiéndose directamente a la entrada oculta de la cámara.

-Esto ha sido una batalla constante para ti desde que tenías once años, no me extraña que estés cansado de ello, yo también lo estaría-, afirmó Severus, cada año el Señor Tenebroso intentaba algo, o un mortífago, pensó pensando en Pettigrew. Así que no, no le sorprendía lo más mínimo que Harry quisiera que se acabara. A decir verdad, él también quería que se acabara, ya había soportado suficiente sufrimiento por parte del Señor Tenebroso, no sabía qué haría si le quitaba a Harry también. Por eso había endurecido sus duelos, tenía que darle a Harry una experiencia lo más realista posible para cuando se enfrentara al Señor Tenebroso, y para su eterno orgullo Harry podía aguantar con creces. Devolvía lo mismo que recibía y rezaba para que fuera suficiente.

-Esperaba algo en la línea de ten cuidado con lo que deseas- dijo Harry sonriendo, su voz sólo ligeramente burlona.

-Eso es-, afirmó Severus, -creo que ya lo sabes por ti mismo-, pero no quiso pensar en ello.

Harry se limitó a resoplar ante las palabras de Severus, pero se dio cuenta de que éste no quería hablar de esas cosas.

-Vamos-, dijo Severus, cuando Harry empezó a retrasarse un poco.