Mi Salvación (TERMINADA)

CAPITULO 30

ALEIX

Mi mano ya estaba roja, no podía creer todo lo que Nastia estaba sufriendo solo para que nuestras hijas nacieran, su cara se deformaba por el dolor. La matrona revisaba cada 1 hora para ver cuan dilatada estaba Nastia. Después de 9 horas de trabajo de parto pasaron a Nastia a la sala de parto, una enfermera me indico que tenía que cambiarme de ropa, fui lo más rápido posible, vi como preparaban cosas para creo cortar la barriga de mi mujer.

-¿Cómo van?- susurro Nastia

Le brillaba la frente a Nastia. Era impresionante todo el sufrimiento que tenia que pasar mi mujer y el resto de mujeres para traer una vida mas, mis respetos a todas esas mujeres.

-Van bien, Reina. Tu tranquila que esos bebes nacerán sanas.

Vi como el doctor sacaba a mi hija, escuche un llanto, llore al ver a mi hija, Nastia lloro junto conmigo. Mientras pesaban, media y vestían a mi hija, una enfermera me la entrego, fue impresionante ver a una cosa tan pequeña en mis brazos, ojos verdes, pelirroja, tenía un parecido a mi hermano, Francis.

- ¿Cómo se llamará esta hermosa, bebe?

-Darya- respondió Nastia-, perfecta mi Darya.

Otra enfermera me entregaba a mi otra hija, ojos azules, pelirroja, era la viva imagen de mi hermana, Franshesca.

-Ella será Dasha.

Después de unos minutos salí de la sala dejando a Nastia en esa sala. Al salir estaban mis padres, mi suegra llegaría al otro día.

-Ya nacieron, son igual a Francis y Franshesca.

Madre se largó a llorar, estaba en shock por el parecido tan grande de mis hijas. A los minutos después entre donde estaba Nastia.

-¿Como están?

Solo pude abrazarlos y llorar, llorar de la emoción. 

-Son hermosas mama- me seque las lagrimas

-Son la perfección tuya y de Nastia, cariño.

                                                                                     ***

Estuve toda la semana en el hospital, Anya se turnaba conmigo, Igor conoció a sus hermanitas, ya no era tan protector con Nastia ahora era protector con sus hermanitas, los chicos quedaron enamorados con mis hijas. Esos bebes no paraban de llorar, ya me tenían con los nervios de punta.

Después de dos días salimos del hospital. Ya estábamos en la casa, Igor dormía en su cuarto, mientras Nastia y yo le dábamos formula, ya que le dolía demasiado al sacarle leche materna.

-¿Quieres intentar de nuevo?

-Si, no quiero que tomen eso.

Le di a Darya que reclamo un poco, pero al sentir el pecho de mi mujer se calmo un poco.

-Por favor- suplico Nastia- que salga leche.

-Veras que no te dolerá.

Nastia hizo una mueca de dolor, negando.

-Vamos, reina- sobe su muslo- aguanta un poco.

Negó Nastia.

-Me duele- sus ojos se llenaron de lagrimas.

-Llamare a mama.

Madre se estaba quedando junto con Anya. Sali de la habitación.

-Madre.

-¿Si cariño?

-Necesitamos tu ayuda.

-¿Le duele mucho?- asentí.

Madre se paro al instante.

-Voy a buscar a Anya.

Llegue a la habitación, encontré a Nastia llorando.

-Ya reina, te romperás el pezón si insistes en que tomen.

-Es que- aspiro los mocos- necesito que tomen, se morirán de hambre.

La puerta se abrió, era madre y Anya.

-Bien- dijo Anya- manos a la obra.

-Me duele mucho, mama.

Ver a Nastia llorar me rompió el corazón, no pensé que darle pecho a unas bebes le causaría dolor.

-Aleix- dijo madre- pone atención.

-Agarra el seno de Nastia- hice lo que pidió-, apretaras con mucha delicadeza- también hice lo que pidió.

Nastia apretó mi muslo con mucha fuerza.

-Para, para, me duele.

Iba a parar pero me interrumpieron.

-Aguanta hija- dijo madre- yo también pase por lo mismo.

Anya posiciono a Darya en el pecho de Nastia.

-Darya va a succionar y tu Aleix harás masajes para que la leche pueda salir- asentí.

Nastia seguía apretando mi muslo.

-Esta tomando, ya esta tomando leche.

Se formo una sonrisa en el rostro de Nastia, el apretón en mi muslo disminuyo.

-Deja que tome todo lo quería, ¿quieres darle a Dasha?

-¿Pero no le dolerá?

-Hijo claro que le dolerá pero después que el pezón deje pasar la leche, ese dolor pasara.

Hice lo mismo con el otro seno, y como era de esperar a Nastia le dolió otra vez pero no tanto.

-Lo siento- me disculpe.

-Tranquilo.

-No gusta verte sufrir.

Acomodaron a Dasha y pudo tomar leche sin ningún problema.

-Te seguirá doliendo pero no les costara como antes.

-Gracias mama.

-Gracias suegra.

-¿Mami?

A pareció Igor restregándose los ojitos.

-¿Que pasa amor?- hable.

-No puedo dormir.

-Ven- dijo Nastia- duerme con nosotros.

-Pero...¿y mis hermanitas donde dormirán?

-En sus cunas amor.

Igor llego corriendo a la cama, les dio besitos en la frente a sus hermanas.

-Termino de darles de comer a tus hermanas y nos acostamos contigo.

-Si mami.

Igor se acomodo entre las piernas de Nastia, ni se movió, no hizo ruido, nada. Darya dejo el pecho, tome a Darya para sacarle todo el gas que tenia retenido. Después de unos largos treinta minutos las bebes estaban dormidas, Nastia estaba boca arriba durmiendo, Igor seguía en la misma posición. Igor quedo en medio de Nastia y yo.

-Como los amo- susurre.

Apague las luces, cerré mis ojos hasta perder el sentido.