Capítulo 31

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-DECLARACIONES-
I got you, honey- Ocie Elliott

Los guardias de seguridad nos llevan al backstage para que veamos a Zed, nos meten a un cuarto y ahí está él, tomando agua mientras le quitan todos los cables.

Voy corriendo emocionada a verlo y él me sonríe quitándose su audífono.

—¡Lo hiciste descomunalmente genial!, fue perfecto todo, tú, el escenario, la banda, las chicas, el sonido, tú, las luces, el piano, el micrófono, tú—digo mientras lo miro, estoy totalmente metida en tratar de mencionar todo lo que hizo que fuera perfecto.

—Ya entendimos que él estuvo perfecto—murmura Ashton en el fondo y él se ríe mientras me abraza.

—Gracias preciosa, te vi, estabas muy emocionada en la audiencia—murmura, después me acaricia la mejilla y me da un beso, sus labios son simplemente perfectos.

—Es que no puedo terminar de procesar todo, ósea estabas ahí pero eras como un rockstar, uno verdadero.....yo de verdad no puedo, me quedé muda un momento, es que no puedo creer que eres mi novio, porque eres tan precioso y también muy talentoso, yo te dije que lo harías genial—al parecer todos están sorprendidos por la repentina ola de palabras que salen de mi boca.

Él me sonríe y me acerca para que le de un beso en los labios.

—Lo hiciste genial—murmuro entre beso y beso.

—Descomunalmente genial—vuelvo a decir y él se ríe.

—Gracias pequitas... gracias—dice y luego deja un beso sobre mi nariz.

—Bueno ya dejen sus cursilerías—se queja Bella y nosotros nos reímos, me quito para que todos puedan felicitar y abrazar a Zed también y me siento descomunalmente feliz.

—No me sorprendería si alguien dice que mataste vidas allá afuera—bromea Ashton.

Todo es perfecto en estos segundos, realmente se siente correcto, el ambiente esta hermoso, todos estamos muy orgullosos de lo que logró hoy pero todo se va al carajo cuando la puerta se abre y entra su padre.

Así es, uno de los hombres que odio en este mundo.

Las risas y murmullos se acaban poco a poco y volteo a ver a Zed quién ya apretó los puños y lo mira fijamente con la mandíbula tensa.

—¡Hijo!—dice él alegre mientras se acerca a mi chico.

—Papá...—murmura Bella mientras se interpone.

—Ahora no—le dice al oído pero él no le hace caso.

—¿Pero por qué están tan amargados?—sigue avanzando y Zed me pone detrás de sí automáticamente, su padre se detiene y murmura un "uh".

—¿Es por ella?, no le haré nada Zed, no soy un monstruo—dice, Zed camina hacia él y lo toma del brazo, me impresiona la fuerza que tiene para jalarlo fuera de la habitación.

Me quedo estática porque no sé qué carajos pasó aquí, ¿Zed tiene miedo de que su padre me haga algo?, ¿qué tipo de persona es?.

Necesito respuestas.

—Disculpen eso—murmura Bella con la cabeza gacha.

Dani, Lana y yo nos juntamos con ella y le decimos que no se preocupe.

—Creo que ni siquiera está sobrio—nos dice.

Por eso se tambaleaba un poco al caminar, y explica porque Zed pudo contra él fácilmente.

Nos quedamos ahí unos minutos más en los que mi ansiedad se despega por los cielos, estoy nerviosa, estresada y tengo miedo, miedo a que lastimen a mi chico.

OUTDATEDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora