Capítulo 28

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-MOMENTOS-
'Til forever falls apart-Ashe & Finneas

Me enfermé.

Eso es completamente evidente, mi panza truena tan fuerte que nos asusta a Dani y a mi.

Mi mejor amiga me ha tomado como su primera paciente por unos días y justo ahora busca al enfermero provisorio, Zed.

Creo que el Karma al que mi chico se refirió estaba sucediendo.

Zed entra por la puerta en ese instante haciendo que Dani suelte un suspiro.

—Si llegabas mañana no hubiera notado la diferencia—dice ella con ironía y antes que Zed pueda responder mi panza cruje fuertemente.

—Ya estoy aquí—él camina hacia mí, Dani me da un beso en la cabeza y sale corriendo por la puerta gritando.

—¡La cuidas bien, mantenla hidratada y por favor si sucede algo llévala a un hospital y me avisas!—su voz se escucha en el pasillo cuando cierra la puerta.

—¿Ya la certificaron como mamá oso?—señala la puerta.

Quiero reírme pero en ese momento el dolor de estómago me lo impide.

Estoy enferma.

Todo eso pasó después de la confirmación formal de nuestra relación, osea en mi cumpleaños.

Me siento rara al decir que somos novio y novia, Siena casi como decir marido y mujer.

Pero regresando al tema de mi cumpleaños, ese día me pareció buena idea comer algo en la calle, porque estábamos siguiendo el plan trazado para la noche.

Ser todo menos ordinarios.

Estábamos vestidos formalmente, mojados y yo iba descalza, así que lo menos común que se me ocurrió hacer fue proponer comer en el carrito de comida de la esquina.

Mentiría si digo que no lo disfruté, porque realmente si lo hice.

El problema vino los días siguientes.

Los dolores comenzaron, ni siquiera podía caminar bien, Zed realmente se preocupó por mi estado y vi en sus ojos remordimiento, pero le respondí con un "valió la pena".

Dani me hizo ir inmediatamente al médico aún cuando los trabajos de la universidad comenzaban a sobrepasarme.

Lo que escuché de labios del Doctor fue que tenía una infección en el estómago y que a eso se debía el dolor, los vómitos y diarrea.

Así es, la vida me había regalado todo el paquete como regalo.

Llevaba dos días, y aún tenía algunos síntomas, aparte de una "gripe de perro" según Ashton.

Y ahora me encuentro aquí, en cama, esperando a recuperarme.

Los besos por ahora están prohibidos, no quiero contagiar a Zed.

Dani lo hizo muy específico.

Nos dio un discurso sobre las bacterias y todo.

Justo ahora ella se había ido el fin de semana a visitar a su mamá.

Aunque la tía de Dani cuidaba a sus hermanas, las tres necesitaban un momento, así que decidieron que era buena idea que Dani fuera unos días y juntas, la tres, visitarían a su madre que se había recuperado desde la última recaída.

El intento de suicido, fue solo eso, un intento, las enfermeras la vieron a tiempo y nada pasó a más, pero aún así le avisaron a Dani.

Pero ese era un tema aparte.

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