La casa de los Barrow era conocida por varias peleas callejeras en frente de esta, nunca me había pintado bien, tampoco sabía a quienes me enfrentaba, respectivamente, no conocía a aquella familia, tan solo rumores.
Peter no me quiso dejar sola, junto a el se unió Derek. Ambos se encontraban furiosos con el tema de la niña, « ¿Como alguien podría vengarse de una persona arrebatándole a su hija? Que tan solo tenía 4 años » Se preguntaban en todo momento.4 años encerrada en un lugar desconocido, 4 años sin sus padres y junto a personas que harían cualquier cosa por el dinero.
Decidí no perder mas el tiempo y me acerque a la puerta. Comprobamos que no había nadie, Luke nos tuvo informados de eso.
" - No os preocupéis. - Dijo mientras jugaba con su piercing. - Iré antes que vosotros y os dejare la casa sola. - Aseguró. - Lo importante es que la niña no sufra por el camino, por lo tanto, nada de peleas. Cuando ella esté a salvo ya habrá tiempo de vengarse. "
Recordé sus palabras y tras forzar la cerradura entramos. Mantuve mi arma contra mi pecho, no podía arriesgarme. La casa no era muy grande, ni siquiera contaba con dos pisos, por lo tanto, no fue tan complicado inspeccionar la casa.
Definitivamente la casa estaba vacía.Una puerta se encontraba cerrada, al final del pasillo, supuse que allí tendría que estar. Mis manos temblaron contra mi pistola.
Peter quiso adelantarse, pero yo lo aparte. Quería hacerlo yo, quería salvarla.
Toque el manillar de la puerta y apreté suavemente. En cuanto mi vista encontró a una niña dormida en la pequeña cama sentí mi corazón saltar de alegría.
Me acerqué lentamente, tenía sus manos bajo su cara, su pelo era rubio y piel amarillenta.
La pequeña habría entrado en este lugar con 4 años, y ahora tendría 8. Acaricie su cabello e hizo una mueca, - aun dormida - y murmuro algo que me costo entender.
Hice memoria recordando su nombre. - Loren, despierta. - Susurre. Abrió los ojos con espanto, y comenzó a chillar, alejándose de mi.
- No, por favor. - Chillaba la niña descontrolada.
Mire a los chicos pidiendo auxilio, pero estos parecían más nerviosos que yo. Mi pulso se aceleró viéndola llorar, ¿qué le habrían hecho para que reaccionara así? Intente no pensar en aquello, ya que llegando a conclusiones podría matar a aquella familia en este mismo instante y con mis propias manos.
- Tranquila Loren, venimos a sacarte de aquí. - Le dije sin saber exactamente que hacer, la rubia se veía muy nerviosa. Después de unos segundos comenzó a sollozar, escondió su cabeza en sus pequeñas y delgadas piernas. Su pelo estaba largo y mal cuidado, pero aún así se veía hermosa.
- Tu hermano y tu padre te esperan. - Le susurre. No quería asustarla. - Están en casa cariño.
No parecía creerme, me di cuenta de que respiraba con dificultad.
- Hey. - Me senté a su lado y acaricie su cabello. - Justin te esta buscando. - Murmure suave. Levanto su mirada y la clavo en mi, tenía el mismo color miel que Justin. Le sonreí.
- ¿Vienes con nosotros? - Le ofrecí la mano, pero ella solo la miro con desconfianza.
Le habían robado la infancia, aquellos inútiles habían destruido la inocencia de una niña. Luche contra mis ganas de salir corriendo, me recordaba tanto a mi que no podía con aquella situación.
- No te conozco, me mentiras, como lo han hecho todos los malos. - Susurro muy bajo.
- No. - Respondí rápidamente. - Soy Alison, quiero ayudarte, que vuelvas con tu familia, déjanos ayudarte.
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BLOW { I Trilogía Scoot }
RomanceTodos los derechos reservados. Alison Scoot busca solucionar sus problemas y vengar la muerte de su madre pero, la aparición de un chico puede que le acabe desviando o, en el peor de los casos, acelerando sus pasos. Instagram: @entreojeras