Me levanté agitada. Mi tumba, ¿En serio? Definitivamente me estaba volviendo completamente loca. Hasta Justin salía en la pesadilla, vaya aparte de en mi casa también se colaba en mis sueños. Mi teléfono sonó, me moví perezosamente de la cama y lo cogí.
- ¿Si? - Estaba muy cansada y aún me seguía doliendo el cuerpo por la golpeada del otro día.
- Hey Ali, ¿Como estas? Me ha dicho Luke que el otro día te golpearon y te dejaron bastante mal. - West parecía preocupado.
- Maldito bocazas. - Maldije, el río.- Estoy bien.
- Vamos a hablar sobre esto, porque esos cabrones no se saldrán con la suya.
Bufe. - Ellos están demasiado ocupados para atenderte amigo mío.
- ¿Que quieres decir?
- ¿Vienes a recogerme?.
- Vale.
- Te cuento entonces en el camino.- Colgué.Me levante de la cama y fui directa al cuarto del baño.
El morado de mis costillas no se iba y era muy feo, aparté la vista del espejo horrorizada y me deshice de la ropa para darme uma ducha.
Ya vestida con unos pantalones negros una camiseta morada que caía de un lado en un brazo, desayune esperando a West. Supe que llegó cuando escuche la bocina de su coche. El tenía un Mercedes-Benz gris, bastante lujoso ya que ganaba mucho con su trabajo al igual que yo. Agarré la mochila y salí de casa.
- Buenos días, ¿Me vas a contar lo que pasó el otro día? - pregunto mi amigo justo al abrir la puerta del copiloto. Yo entré y me senté colocando mi mochila encima de mis piernas.
Cada vez que recordaba lo ocurrido la otra tarde la rabia consumía todo mi cuerpo, causando las ganas de salir corriendo. Cómo me gustaría hacer eso, salir. Correr y correr, escapar de todos. En mi mundo todos querían algo de mi, todos buscaban algo que les beneficiase. Pero escapar era de cobardes, uno tenía que afrontar sus problemas, dar la cara. Porque escapando de ellos sólo lograbas alargar el duelo. Y alargar el duelo significaba una tortura más larga.
- ¿Te acuerdas lo que te conté, que estaba buscando al tal Francisco Martelli el que asesinó a mi madre? - El asintió sin apartar la mirada del camino apretando los labios. - Pues el hijo de puta me hizo el trabajo más fácil, vino con unos amigos a buscar a mi padre. - resople. - Y Luke ya te habrá contado lo que sigue.
El apretó el volante. - ¿Qué les dijiste de tu padre?
- Que estaba en San Francisco, trabajando en una sala de billar. - reí, el me miro un segundo inspeccionando si estaba bromeando, yo deje de reír y lo mire levantando la ceja. - ¿Qué?
- ¿Cómo se te ocurre mentirles? - levanto su tono, cosa que me molesto bastante. - ¿No te has parado a pensar que cuando se den cuenta de que les has engañado van a matarte?
- Igualmente me matarían si les dijese que no sabía. - Ataque de vuelta. El negó seguidamente con la cabeza.
En lo que faltaba del camino no dijimos ni una palabra, eso quería decir que West estaba cabreado. Salimos del coche los dos y caminamos hacia el instituto. En el aparcamiento del instinto estaba Justin con su amiguita que cuyo nombre ni me acordaba. Los dos estaban caminando para ir a clases, observe a Justin y me acorde de mi pesadilla, ¿Querría decir algo? Estaba pensando que me estaba volviendo loca. Justin giró su cabeza y me vio, después sonrió. No hagas eso, no. Tenía que seguir mostrando enfado haberse colado en mi casa de esa manera.
- Buenas. - Luke apareció junto a Zayn caminando con nosotros. Nosotros saludamos de vuelta.
- ¿Habéis hablado con el jefe? - Pregunto Zayn curioso. West y Luke asintieron.
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BLOW { I Trilogía Scoot }
RomanceTodos los derechos reservados. Alison Scoot busca solucionar sus problemas y vengar la muerte de su madre pero, la aparición de un chico puede que le acabe desviando o, en el peor de los casos, acelerando sus pasos. Instagram: @entreojeras