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Se podría decir que desde su nacimiento estuvo destinada a no llevar una vida normal, una vida tranquila, ni mucho menos una muerte pacífica. Fue huérfana desde que tiene memoria, su proveniencia fue y es un misterio. Sin embargo, para ser una niña abandonada tenía características físicas llamativas y hermosas. Su cabello era tan negro como el carbón y sus ojos eran el reflejo del cielo más lindo, un celeste magnifico, con una piel como la nieve. Resaltaba entre los demás niños, en más de un aspecto, porque su físico no lo era todo, tenía un talento natural, nato, sus dedos hacían magia frente a un piano, su corazón latía música y su alma dirigía toda una orquesta en su interior. Cuando ella fue encontrada frente a la puerta de la iglesia estaba en una canasta de camelias, estaba enferma y no parecía que fuera a sobrevivir, sin embargo, lo hizo. En la iglesia se creyó que Camelia era una bendición y que su propósito en la vida era grande.

Que pensamientos más alejados de la realidad.

La belleza de Camelia la destinó a ser raptada y luego vendida al bajo mundo de los nobles, porque la mayoría de las sirvientas fueron niñas lindas que desaparecieron de sus hogares, porque la belleza en la clase alta significa mucho, y ni siquiera entre los sirvientes podía existir imperfección, por lo menos en la mayoría de los casos.

Camelia fue vendida muy rápido y a un alto precio. Era solo una niña pero tuvo que aprender rápido y pensar como alguien con madurez emocional, se obligó a sí misma a crecer y ser más fuerte, a saber sobrevivir de la mejor manera. Ella creció yendo de una familia a otra, siendo intercambiada como si fuera un objeto, pero eso no le importaba, solo había una cosa en su mente: ser la mejor.

Ser una sirvienta excepcional le aseguraría un mejor trato y una mejor comida, así como la envidia y el despreció de las demás sirvientas, pero si algo había aprendido en estos años era amar la soledad. Por lo menos fingir amarla.

Camelia se las arregló para vivir de la mejor manera, hasta finalmente ser recomendada y vendida a una de las ocho familias que controlan los sub-estados. Aún era joven, pero se convirtió en la ama de llaves de la mansión por su personalidad seria y aplicada, había alcanzado lo más alto que podía alcanzar, no había nada más por lo que esforzarse, más que el hecho de mantenerse en ese puesto. Se convirtió en una ama de llaves lo suficientemente estricta para imponer respeto absoluto a los sirvientes, pero era lo suficientemente amable para no ser odiada.

Unos meses pasaron, el matrimonio de la mansión parecía problemático, muchas discusiones por las noches y silencios filosos durante el día. Un día la señora de la casa no salía de su habitación, Camelia, como ama de llaves era cercana a la señora, decidió entrar para ver cual era el motivo de su encierro. La noche anterior había ocurrido una fuerte discusión, ahora Camelia veía las consecuencias de ello, su señora estaba herida, había sido golpeada por su esposo y parecía estar demasiado asustada como para siquiera salir.

Camelia recordó sus inicios como sirvienta y el terror de ser golpeada por alguien de quien claramente no te puedes defender. La señora de la mansión jamás había sido cruel con ella, quizás un poco fría, indiferente, pero no había razón para odiarla por ello, mucho menos pensar que merecía algo como esto. Camelia ofreció su apoyo, no como empleada, sino como mujer.

Su empatía y amabilidad la convirtieron en alguien de suma cercanía para la señora de la mansión. Bebían el té juntas y conversaban como mujeres libres, discutían sobre libros y flores, sobre sueños y desilusiones.

Un día la señora le cuestionó a Camelia si había o hubo algo que le apasionará en la vida, algo que la hiciera sentirse viva y bendecida, entonces habló de su viejo amor por el piano, de la magia de la música y la nostalgia en su corazón. La señora se conmovió por la historia de su ama de llaves, pues jamás la había visto hablar tan sentimental, así que le pidió que tocará algo para ella. Camelia se negó al instante, no podía hacer algo como eso, sin embargo, la señora insistió con especial anhelo, así que aceptó.

Camelia se sentó en el fino banco de madera, frente a aquel gran y hermoso piano de cola, y en cuanto tocó la primera tecla su corazón danzó, su alma se gozó envuelta en la magia de una melodía. Por primera vez en mucho tiempo volvió a sentir la vida recorriendo sus venas, se sintió libre y feliz, su corazón volvió a sentir, de nuevo se sintió Camelia, no una sirvienta ni una ama de llaves, no una mujer que creció tratando de sobrevivir, no una niña que fue raptada y vendida, no una bebe que fue abandonada.

Ella simplemente se volvió a sentir ella misma, porque Camelia no era una flor, Camelia era una melodía.

En ese momento Camelia sintió tocar el cielo con la punta de sus dedos, una caricia sutil apenas perceptible, pero tan embelesante y maravillosa. Sin embargo, tocar el cielo solo hizo más fuerte su caída al infierno.

Como si realmente fuera magia, la melodía creada por sus manos la hacía más hermosa, ella brillaba como una hermosa estrella en el cielo nocturno, su sonrisa sincera al tocar era simplemente encantadora. Y el señor de la casa lo había notado, desde la cima de las escaleras, observó a Camelia tocar el piano, tan hermosa y vulnerable.

Las ocho familias nobles son las más cercanas a la familia real, pero su posición sobre la clase alta regular depende de varias cosas, los matrimonios, los trabajos y la descendencia. Un matrimonio ridiculizado estaba destinado a la burla y la miseria, un matrimonio sin ingresos estaba destinado a desvanecerse, un matrimonio sin hijos estaba destinado a la caída total. Tradiciones son tradiciones. Y el señor de la mansión no estaba dispuesto a la caída total.

Porque nadie tenía porqué enterarse que su esposa no puede darle hijos.

Sí algo caracteriza a los nobles es que son perfectos mentirosos. Nadie sabría que su descendencia proviene de otra mujer. La historia sería simple, un embarazo complicado obligó a su esposa a reposar los nueve meses de gestación, pero afortunadamente todo salió bien al final.

Nadie sabría la oscura verdad detrás de aquel bebe, nadie sabría del sentimiento de humillación de la señora de la mansión, del sentimiento de traición e inutilidad. De la amargura de ver a su esposo tener descendencia con otra mujer, de haber fallado como esposa y terminar siendo un simple adorno a lado de él. Nadie sabría del odio desmedido que la señora de la casa desencadenó hacia su ama de llaves, hacía Camelia, hacía su amiga.

Aunque Camelia no hubiera querido hacer nada de lo sucedido, aunque ella rechazó todas las insinuaciones sexuales de su patrón, aunque gritó por ayuda cuando la forzó, aunque lloró desconsoladamente cuando él salió de la habitación luego de haberla embarazado, a pesar de su dolor y miedo, aquella mujer sólo podía percibir traición y decepción. La mujer de la mansión no podía hacer nada más que odiarla, odiar a Camelia, a su esposo, a la maldita nobleza y sus tradiciones absolutas. No podía hacer nada más que odiar, incluso a ella misma.

Durante nueve meses Camelia pensó en su situación y tomó una decisión. Dar a su bebe a cambio de su libertad, a cambio de otra identidad y recomendación. Mantendría la boca cerrada y olvidaría lo sucedido si la dejaban vivir.

Por lo menos eso fue lo que les hizo creer.

Camelia se convirtió en Camilo, y Camilo se convirtió en un gran pianista de la familia Reiss, quienes respaldaron su talento y lo hicieron conocido. Y mientras Camilo tocaba en reuniones de los nobles y se ganaba la vida haciendo lo que amaba, Camelia, desde las sombras, planeaba cómo poder acercarse a su bebé.

Así pasaron varios años, hasta que la vida le ofreció la oportunidad de volver a ver a aquella personita que le había demostrado que la vida en sí misma es hermosa, que todo aquel infierno vivido había valido la pena si era necesario para su existencia, valió la pena vivirlo con tal de ver aquellos hermosos ojos dorados enmarcados en esas preciosas pestañas rojizas.





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Quiero mucho a Camelia, es un personaje que no estaba planeado, y que cuando llego a mi mente no estaba destinada a tener un papel tan importante en la historia, pero fue clave para poder desarrollar todo lo demás y que la historia haya quedado como la han leído hasta ahora.

Gracias por leer, no olviden votar, y si quieren comentar♡

Posdata: me equivoqué con el vídeo, ya lo cambié xD.

-Catharphis.

Girar en el vacío : Eren JaegerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora