¿𝗣𝗢𝗥 𝗤𝗨𝗘 𝗢𝗗𝗜𝗔𝗥𝗧𝗘? （Ｌｏｏｎａ ｘ Ｌｅｃｔｏｒ）

𝕻𝕬𝕽𝕿𝕰 3

NARRA ___

Habia sido golpeado por mi compañero, había caído de forma accidental dentro del portal, lo único que pude ver fue a mi colega pintarme una sonrisa antes de caer hacia el portal, tras a ver caído, todo a mi alrededor había desaparecido por completo, volviéndose un lugar oscuro y frío, trate de mirar a mis alrededores buscando la forma de salir de donde me encontraba, estaba con la respiración agitada, quedándome con el cuerpo realmente congelado, baje mis manos hacia mis piernas solo para toparme con la sorpresa que no estaba pisando nada, no había nada en dónde yo estuviera parado, alarmado empecé a sentir como mi cuerpo empezaba a ser arrastrado hacia abajo, una gran cantidad de viento golpeaba mi rostro, sintiendo mi cuerpo entrar en escalofríos, parecía estar cayendo en la nada, no miraba más que la oscuridad, alcé mis brazos al aire, empezando a caer en picada esperando impactar contra algo, llegué a pensar que no iba a pasar nada, estaba cayendo hacia el oscuro vació, la nada, un agujero sin fondo, de forma inesperada, durante la caída pude notar a lo lejos varios puntos blancos, sin creer lo que estaba viendo, talle mis ojos desconsertado ya que eran tantas luces blancas que podía decir que estaba rodeado de una infinidad de luciérnagas, las luces empezaban agrandar, parpadeando de forma rápida, algunas incluso se movían en línea recta, dibujé una sonrisa aliviado que no se trataba de algún agujero sin fondo, las luces cada vez se iban agrandando al punto de formar varias figuras enormes a sus alrededores, fue ahí cuando me di cuenta de algo que realmente me había dejado con la boca abierta, se trata de una enorme ciudad, las luces eran nada más los edificios de algunos sitios, los movimientos de luces se trataban de vehículos, de forma inesperada, justo a mi alrededor, todo empezaba a tornarse a un color rojo oscuro, empezando a perder el vuelo, estaba cayendo de forma desesperada sacudiendo con desesperación mi cuerpo por el aire, lleve mi vista a lo que parecía un cielo, una enorme estrella dibujada, recordando los mismos símbolos que había visto en la parte de la hoja, había llegado el momento del impacto y para mí mala suerte estaba apunto de estrellarme contra un par de árboles, cerré mis ojos solo esperando el momento tan doloroso que me esperaba...

No pasó nada, antes de impactar contra el suelo, mi cuerpo fue sacudido de golpe, sintiendo como mis brazos quedaban alzados al aire, procedí abrir mis ojos con lentitud solo para ver que me encontraba justo cerca del suelo, suspiré aliviado, un golpe como esos sería la causa de mi muerte, estaba tan agradecido por no haber chocado, no me di cuenta que empezaba a elevarme nuevamente al aire, entre mis brazos el agarre de lo que serían manos apretaban mis brazos, gire mi cabeza con timidez, dándome cuenta que se trata de una de esas criaturas, un hombre de piel roja, enormes cuernos, portaba alas de color negras mientras que de su parte trasera se mostraba una larga cola con una punta que se dirigía a mi cuello, alarmado del ser tan asqueroso, lleve mis manos hacia sus agarras enterrando mis uñas en lo que serían sus patas, escuché como soltó un grito de dolor procediendo a soltarme estrellando contra el suelo, debía por decir que el ambiente se sentía frío y pesado, no tenía tiempo de tomar nisiquiera un respiro, voltee a ver al horrible hombre, este había volado hacia donde estaba, para mí suerte pude hacerme a un lado, el ser enterró sus garras contra el suelo fallando su ataque, forcejeaba para sacar sus garras del suelo, armado de valor, me acerque hacia el solo para darle un fuerte golpe al rostro, acompañado con un codazo al cuello dejándolo en el suelo, sin creer lo que estaba viendo, se trataba de un demonio, uno realmente horrible, de su boca brotaba un líquido negro, estaba en el suelo inmóvil, dibuje una sonrisa algo victoriosa, ya que está era la segunda vez que me enfrentaba a una de esas cosas, dejando el orgullo a un lado, empecé a correr hacia donde el camino me llevará, todo era tan idéntico a una ciudad común y corriente, corria en una especie de carretera justo a mis alrededores, enormes edificios con diferentes y promociones de cosas que ni yo no sabía que existían...