Era como una película.
El lugar, algo oscuro, pero lleno de colores cálidos.
Las personas hablaban un poco más bajo que en el otro bar, pero se los veía igualmente felices, mostraban sonrisas y reían tranquilos.Suecia no los miró, tan solo empezó a caminar por el largo pasillo rodeado de mesas de madera que llevaba a la barra, los dos sureños lo siguieron unos momentos después, cuando lograron salir de su estado de paralizadora sorpresa.
Argentina siguió explorando el lugar con la mirada, notó, en las zonas tan oscuras como la noche del bar, a varias personas hablando calmas, pero lo que le llamó la atención, y le puso los pelos algo de punta, fueron los ojos blancos brillantes que tenían, además de las marcas de igual color que tenían en los brazos, resaltantes incluso en la noche más oscura.
- ¿Que les... pasa en los ojos? - Susurró el argentino
El sueco les dió una mirada rápida antes de responder.
- Ellos tan solo controlan la luz, así que se ven algo distintos... Todos lo hacemos realmente, pero depende de que clase de "Poder" tengas - Le explicó, luego lo miró por sobre el hombro y se señaló el ojo mientras pasaba este a un color blanco - Nosotros somos mitad luz, mitad fuego, por eso los ojos y las manos rojas -
De repente, Chile le puso una mano en el hombro, llamándole la atención. El chileno le marcó con la mirada algo cercano al techo, al fijarse encontró unas especies de balcones extraños... Pero no había manera de subir hacia ellos... Quizá por eso algunas las personas que estaban allí arriba estaban volando o flotando mientras charlaban con quiénes estaban parados en estos.
El bicolor abrió sus ojos con sorpresa, nunca había visto una de esas "Cosas" voladoras en la televisión, no tenía ni idea de que existían.
De hecho, no tenía ni idea de la existencia de muchos de los que habían allí, algunos con cuernos, otros con colas, otros cuantos con extrañas marcas en la piel... Por un momento se sintió suertudo de que el poder que se le había pegado no lo hacía resaltar de esa manera... No sabía cómo podría esconderse con dos cuernos saliendole de la frente...Llegaron a la barra, igualmente era de madera, como la mayoría de cosas allí.
Probablemente para dar una imagen acogedora, después de todo, ese era el único lugar en donde gente como ellos podían estar sin problemas.Suecia hizo un pedido de bebida con nada más que una seña de mano, el bartender debía estar acostumbrado a verlo, porque al instante supo a lo que se refería.
- ¿Por qué nos trajiste aquí, weon? - Le preguntó el chileno al más alto de los tres
Chile estaba colocado entre los otros dos, una manera de bloquear la vista de todos en él, nadie debía notar que había un humano entre ellos... O habría un caos que ni su muerte podría calmar.
- Es un lugar importante para gente como nosotros, era necesario que lo conozcan - Respondió el sueco, tomando la bebida que el barman le acababa de dar y dandole un sorbo, antes de darse vuelta, apoyando sus codos en la superficie de la barra detrás de él y mirando el resto del bar - Es un punto de encuentro, un lugar seguro... Para algunos, un hogar... - Agregó, desviando la mirada al final
ESTÁS LEYENDO
Don't Tell Them... - ChiArg-
Fiksi PenggemarEn un mundo en dónde algunas personas nacen con extraños poderes. Personas demasiado peligrosas como para mantenerlas con vida. Deben matarlas antes de que ellas los maten. Viven escondidas, en las sombras, demasiado asustadas como para...